En Cataluña, este verano, se realizarán 442 obras de mejora en centros educativos con una inversión de 50,9 millones de euros.

Este verano, en Cataluña, se llevarán a cabo un total de 442 actuaciones para mejorar los centros educativos de la región.

Estas mejoras contarán con un enfoque especial en la climatización de los espacios comunes y polivalentes dentro de los centros.

El presupuesto asignado para estas obras de mejora asciende a 50,9 millones de euros, una inversión considerable que demuestra el compromiso de las autoridades catalanas con la educación.

De este presupuesto, 44,7 millones de euros se destinarán a las reformas en 418 centros educativos, mientras que los 6,2 millones de euros restantes se utilizarán para retirar el amianto de 24 centros educativos en todo el territorio catalán.

Dentro del plan de reformas, se incluye el Plan de choque para las altas temperaturas, que está diseñado para hacer frente a las condiciones extremas de calor que afectan a los centros educativos durante el verano.

Con una inversión de 5 millones de euros, este plan se implementará en 104 centros priorizando aquellos con estudiantes más vulnerables.

El objetivo principal de este plan de reformas es proporcionar un entorno más adecuado para el aprendizaje, teniendo en cuenta factores como la salud y el bienestar de los estudiantes.

Además de la climatización de los espacios comunes y polivalentes, se instalarán elementos que ayuden a mitigar el calor, como protecciones solares, toldos, fuentes y puntos de agua.

También se promoverá la renaturalización de los patios, principalmente aquellos que están hechos de cemento, para potenciar la presencia de árboles, agua y sombra.

Asimismo, como parte del plan de choque, se distribuirán ventiladores en los centros educativos para proporcionar una mayor comodidad durante los días calurosos.

Además, se ha creado una guía de actuación llamada POCAT, que brinda instrucciones a los centros educativos sobre cómo actuar durante episodios de altas temperaturas, permitiendo flexibilidad en las actividades académicas sin alterar el horario de apertura del centro.

Estas medidas buscan garantizar un entorno favorable para el aprendizaje y el bienestar de los estudiantes catalanes.

La inversión en la mejora de los centros educativos demuestra el compromiso de las autoridades con la educación de calidad y contribuye a crear espacios seguros y adecuados para el desarrollo integral de los estudiantes.