La Junta de Castilla y León se reúne con entidades sociales y empresariales para promover la integración laboral en el sector agrícola mediante programas de formación que abordan conocimientos básicos y prácticas seguras en las explotaciones rurales.
En un contexto donde la falta de mano de obra cualificada continúa siendo un reto para el campo, las autoridades regionales buscan facilitar la incorporación de nuevos trabajadores mediante programas de capacitación específicos.
El viceconsejero de Política Agraria Comunitaria y Desarrollo Rural, Jorge Llorente, lideró una reciente reunión con una veintena de organizaciones sociales y empresariales dedicadas a la captación, formación y acompañamiento de trabajadores rurales.
Estas entidades, como la Fundación INTRAS, la Asociación de Ganaderos GEO y la Cruz Roja, entre otras, trabajan en la región para promover oportunidades laborales en el medio rural, especialmente en un momento donde la demanda de mano de obra en las explotaciones agrícolas y ganaderas supera la oferta disponible.
Supuestamente, en la reunión se acordó diseñar conjuntamente una serie de acciones formativas que proporcionen a los nuevos empleados conocimientos básicos sobre la organización del trabajo en granjas, manejo de animales y cultivos, higiene y bioseguridad, además de las normas de convivencia y prevención de riesgos laborales.
La finalidad es que los trabajadores lleguen a sus puestos con una preparación mínima, garantizando así la seguridad y la eficiencia desde el primer día.
Se estima que, en Castilla y León, cerca del 70% de las explotaciones agrícolas y ganaderas reportan dificultades para cubrir vacantes en campañas puntuales o durante los fines de semana, lo que afecta la productividad y la sostenibilidad del sector.
Para hacer frente a este problema, las autoridades regionales consideran clave impulsar actuaciones piloto en diferentes territorios, con el objetivo de evaluar su efectividad antes de su posible expansión.
Asimismo, se supuestamente acordó que los contenidos de la formación deben adaptarse a la diversidad de perfiles de los trabajadores, incluyendo jóvenes sin experiencia, personas migrantes y aquellos en proceso de transición laboral.
La calidad y legalidad de estas acciones formativas también son aspectos prioritarios, buscando garantizar que los programas cumplan con la normativa vigente y ofrezcan una formación de calidad.
La reunión contó con la participación de organizaciones como la Fundación Talento 58, la Oficina del Emigrante de Benavente, el Ayuntamiento de Brañosera y la Cámara de Comercio de Valladolid, entre otros.
Estas instituciones colaborarán en la implementación de las acciones formativas y en la evaluación de su impacto.
Supuestamente, esta iniciativa forma parte de un plan más amplio de la Junta para mejorar la fijación de población en las zonas rurales, promover el empleo estable y atraer talento joven al medio rural.
Además, busca mejorar la percepción social de los trabajos agrícolas y ganaderos, que en el pasado han sido considerados poco atractivos.
La región de #Castilla y León ha sido tradicionalmente un referente en la agricultura y la ganadería en España
De acuerdo con datos históricos, la región de Castilla y León ha sido tradicionalmente un referente en la agricultura y la ganadería en España, con una larga tradición que se remonta a la Edad Media.
Sin embargo, en las últimas décadas, la mecanización y los cambios en las políticas agrícolas han provocado una disminución en el número de trabajadores y en la población rural.
La actual estrategia busca revertir esta tendencia y garantizar la continuidad del sector.
Supuestamente, en los próximos meses, se realizarán nuevas reuniones con organizaciones profesionales y agentes del territorio para seguir afinando los programas y garantizar su éxito.
