La Junta de Castilla y León activa una alerta ante la previsión de fenómenos meteorológicos adversos por nevadas y precipitaciones en ocho provincias, con nevadas que podrían descender hasta 800-900 metros y recomendaciones de autoprotección para la ciudadanía.
La medida está vigente desde las 12:00 horas de este sábado 20 de diciembre y su duración dependerá de la evolución de las condiciones. A partir de la jornada de hoy se espera un descenso de las cotas de nieve que podrían situarse entre 800 y 900 metros en la Comunidad.
De cara al domingo, se esperan precipitaciones en forma de nieve en los principales sistemas montañosos y podrían extenderse a amplias zonas de la meseta de las provincias citadas.
El frente también podría dejar lluvias, con intensidad variable, y en el cuadrante noroccidental existiría la posibilidad de lluvias localmente fuertes.
Este episodio de inestabilidad atmosférica podría provocar una tendencia generalizada al aumento de caudales de ríos y arroyos, con posibles afecciones en infraestructuras y/despliegues de servicios.
Entre las recomendaciones oficiales se destacan: vestir varias prendas ligeras y cálidas para protegerse de las bajas temperaturas; evitar prendas ajustadas para permitir la circulación del aire; proteger rostro, cabeza y manos; evitar que las personas de edad avanzada y los menores salgan a la calle; ante ventiscas, limitar desplazamientos; tomar precauciones para evitar intoxicaciones por braseros o estufas en interiores; contar con un extintor ante posibles incendios; si hay que viajar, no hacerlo solo; en el coche, equipar con radio, cadenas, pala, cuerda, linterna, ropa de abrigo, manta y alimentos; mantener el depósito de combustible lleno; revisar frenos, neumáticos y alumbrado; reponer anticongelante; colocar las cadenas ante hielo o nieve.
Estas alertas se repiten cada invierno en #Castilla y León y han llevado a la activación de planes de emergencia y al refuerzo de servicios municipales para mantener la movilidad y la seguridad de la ciudadanía
Históricamente, estas alertas se repiten cada invierno en Castilla y León y han llevado a la activación de planes de emergencia y al refuerzo de servicios municipales para mantener la movilidad y la seguridad de la ciudadanía.
En años pasados, #nevadas intensas en Segovia y Zamora obligaron a movilizar recursos de protección civil y a reforzar reservas de sal y personal para labores de limpieza de carreteras y atención a personas vulnerables.
Presuntamente, el despliegue de medios de protección civil podría implicar gastos en torno a decenas de miles de euros, dependiendo de la duración de la alerta y de la intensidad de las nevadas.
Según estimaciones no oficiales, la compra y distribución de sal, así como el refuerzo de personal y maquinaria para labores de limpieza y gestión de emergencias, podría oscilar entre 40.000 y 100.000 euros. Estas cifras son aproximadas y están sujetas a cambios según la evolución meteorológica y la planificación de cada administración.
