La Consejería de Movilidad y Transformación Digital de Castilla y León realiza una inversión significativa para modernizar el firme en la autovía A-601 en Pinarejos, empleando técnicas innovadoras que prolongan la vida útil de la vía y garantizan una mayor seguridad vial.
El proyecto, que se ejecuta en colaboración con la concesionaria AUTOVÍA DEL ERESMA S.A., introduce una innovadora técnica basada en la instalación de una geomalla de alta resistencia bajo la capa de asfalto. La geomalla, fabricada con poliéster y reforzada con betún, funciona como un refuerzo que ayuda a distribuir las tensiones en el pavimento, previniendo la formación de grietas y alargando la vida útil del firme.
Desde hace décadas, la conservación de #carreteras en #Castilla y León ha evolucionado, adoptando nuevas tecnologías que permiten reducir costes y minimizar el impacto ambiental.
La utilización de geomallas en la reparación de pavimentos es una de las innovaciones que ha surgido en los últimos años, con resultados prometedores en términos de durabilidad y seguridad vial.
La experiencia en otros países europeos, como Alemania y Francia, ha demostrado que estas técnicas no solo prolongan la vida del asfalto, sino que también reducen la frecuencia de las reparaciones y el número de cortes en la circulación.
Los trabajos en la A-601 se centrarán en el carril derecho en sentido Valladolid, en un tramo de aproximadamente 3,7 kilómetros, específicamente entre los kilómetros 68+300 y 72+200.
La intervención se realizará en solo dos jornadas nocturnas, minimizando así las molestias para los usuarios y garantizando la fluidez del tráfico.
La elección de estas fechas, fuera de las horas punta, responde a la estrategia de la Junta para reducir el impacto en la movilidad regional.
Este refuerzo del firme en Pinarejos forma parte de una serie de acciones que la Junta ha puesto en marcha para modernizar y mantener en buen estado la red viaria de Castilla y León
Este refuerzo del firme en Pinarejos forma parte de una serie de acciones que la Junta ha puesto en marcha para modernizar y mantener en buen estado la red viaria de Castilla y León.
La política de conservación y mejora de carreteras ha sido una prioridad desde hace décadas, con antecedentes que datan de la década de los 80, cuando se comenzaron a implementar las primeras campañas de rehabilitación y mejora de los caminos rurales y principales arterias de comunicación.
El uso de geomallas y otras tecnologías innovadoras ha permitido reducir el número de baches, mejorar la seguridad y disminuir las emisiones derivadas de reparaciones frecuentes.
Además, estas obras contribuyen a la sostenibilidad ambiental, ya que al reducir las intervenciones en el pavimento, también disminuyen las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con los trabajos de mantenimiento.
La inversión en infraestructuras en Castilla y León ha sido constante, con un enfoque en aprovechar nuevas técnicas y materiales que permitan obtener mejores resultados a largo plazo.
La apuesta por la #innovación en obras de conservación vial refleja el compromiso de la Junta con un transporte más seguro, eficiente y respetuoso con el medio ambiente, en línea con los objetivos europeos de movilidad sostenible.
