La Vicejefa de Gobierno de Buenos Aires anunció un ambicioso programa para enfrentar y prevenir la violencia contra niños y adolescentes, con estrategias respaldadas por la ONU y alianzas intersectoriales.

En un esfuerzo por combatir uno de los problemas más urgentes que enfrentan las sociedades modernas, Clara Muzzio, Vicejefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, presentó un innovador plan de acción para los próximos años, con el objetivo de reducir significativamente la violencia que sufren niños, niñas y adolescentes en la capital argentina.
El lanzamiento oficial se realizó en el marco del plan integral 2025-2030 Inspire BA, una iniciativa que responde a recomendaciones internacionales y que ha sido adoptada por varias ciudades en el mundo.
La propuesta, elaborada en colaboración con organismos multilaterales y organizaciones locales, busca poner a los niños en el centro de las políticas públicas, reafirmando que su protección y bienestar deben ser prioridad en la agenda social.
Este plan forma parte de una estrategia global impulsada por la ONU, que contempla siete líneas de acción basadas en evidencia, destinadas a reducir la violencia infantil en distintos contextos.
En 2022, Buenos Aires se convirtió en la cuarta ciudad a nivel mundial en adherirse oficialmente a esta iniciativa, demostrando su compromiso con la protección de la infancia.
El Ministerio Público Tutelar, en alianza con la Red por la Infancia y la Organización Panamericana de la Salud, lidera la implementación de estas acciones intersectoriales.
Entre las principales líneas de trabajo se encuentran campañas de sensibilización, fortalecimiento de los mecanismos de protección, y programas de intervención temprana en hogares y escuelas.
Durante el acto de presentación, Clara Muzzio expresó la importancia de este esfuerzo colectivo: “Si hay una tarea verdaderamente trascendente en estos tiempos, es volver a poner a los niños en el centro de nuestras miradas, de nuestras políticas y de nuestro futuro”.
El trágico caso de Kim Gómez, una de las peores tragedias infantiles en Argentina
La historia de Kim Gómez, una niña de 7 años víctima de violencia vial en Argentina, conmueve al país y pone en evidencia la gravedad de la inseguridad y la violencia contra menores. La tragedia ocurrió en febrero pasado y aún permanece en la memoria de la comunidad.La funcionaria destacó que, según datos internacionales, uno de cada dos niños en el mundo sufre algún tipo de violencia, y que en Argentina, seis de cada diez menores son criados en entornos donde se utilizan prácticas violentas como gritos, humillaciones y castigos físicos.
Las cifras en la Ciudad de Buenos Aires reflejan la gravedad del problema: en 2023, el 61% de las intervenciones realizadas por organismos de protección estuvieron relacionadas con casos de violencia familiar y abuso sexual.
La Oficina de Violencia Doméstica reportó más de 5.300 víctimas infantiles en ese año, lo que representa un incremento del 15% respecto al año anterior.
El plan que propone Muzzio busca, además, fortalecer las políticas públicas existentes y promover una cultura de respeto y protección hacia los menores.
La iniciativa contempla acciones concretas como campañas educativas, formación de profesionales y la creación de centros especializados para la atención y rehabilitación de víctimas.
En el contexto histórico, cabe recordar que en Argentina, la protección de la infancia ha sido un tema prioritario desde la sanción de la Ley 26.061 en 2005, que estableció un marco integral de protección. Sin embargo, los desafíos persisten, y por ello, las autoridades locales apuntan a una transformación profunda en la gestión de la problemática.
El compromiso de Buenos Aires con esta causa refleja una tendencia global de priorizar los derechos de los niños y niñas, reconociendo que su bienestar impacta directamente en el desarrollo social y económico del país.
La puesta en marcha de este plan es un paso importante en esa dirección, y se espera que sus resultados contribuyan a construir una sociedad más justa y segura para las generaciones futuras.