En Zaragoza, las nuevas Zonas Jóvenes de los centros escolares, los antiguos PIEEs, reforzarán el servicio de Educación Especial con más profesionales y más horas de atención dedicadas a la población joven más vulnerable.

Así figura en los nuevos pliegos que buscan atender las necesidades de los jóvenes adaptando las actividades a lo que realmente demandan, siguiendo los objetivos marcados en la Estrategia Joven 2030 aprobada en el anterior mandato.

En el nuevo contrato, el Ayuntamiento ha querido priorizar la atención a la infancia y juventud más vulnerable, la que presenta mayor dificultad a la hora de acceder a una oferta de ocio saludable.

Para ello, los nuevos pliegos duplican el número de profesionales dedicados a la Educación Especial, pasando de uno a dos técnicos especializados, y doblando el número de horas hasta alcanzar las 60 semanales.

Con esta mejora, se apuesta por reforzar las oportunidades de los jóvenes con necesidades especiales, doblando la atención y manteniendo el mismo presupuesto económico.

Sin duda, esta es la mayor fortaleza del presente pliego y la apuesta del Servicio de Juventud: apoyar y apostar por quienes no tienen tantas opciones de ocio, ha comentado la concejal de Juventud, Ruth Bravo, en una rueda de prensa, donde ha detallado las novedades del servicio.

Estos pliegos se enmarcan dentro del desarrollo de la Estrategia Joven 2030, que prioriza ante todo la participación de los jóvenes en el diseño de las políticas de juventud.

Este año se ha impulsado un proceso participativo diseñado en varias fases para conocer sus inquietudes con el objetivo de adaptar y actualizar las actividades y programas a lo que ellos realmente quieren y demandan.

Bravo ha explicado que, en esta ocasión, se ha decidido plantear la contratación en dos pliegos diferentes; por un lado, las Zonas Jóvenes de los centros escolares y, por otro, las Zonas Jóvenes, conocidas como las antiguas Casas de Juventud.

Esta decisión se debe al importante desarrollo que ha tenido el servicio en los centros educativos, expandiéndose a los colegios públicos integrados.

Esto requería una contratación diferenciada de la gestión de los servicios de un programa que tiene un perfil muy específico y un importante volumen de gestión, ha comentado Bravo.

Son, por tanto, dos proyectos diferentes, atendidos además por profesionales de diferente categoría.

Mientras para las Zonas Jóvenes se requiere el título de Bachillerato, para las Escolares se exige una diplomatura.

El Programa Zona Joven en los Espacios Escolares se configura como un espacio de actuación socio-educativa, destinado a reforzar la oferta de los centros de enseñanzas secundarias de la ciudad con actividades complementarias que contribuyan al desarrollo de su alumnado y a prevenir situaciones de riesgo y exclusión social.

Los nuevos pliegos del contrato se dividen en ocho lotes e incluyen medidas necesarias para que la animación de las Zonas Jóvenes atiendan las necesidades de los jóvenes de una manera eficaz, buscando un equilibrio entre las actividades de ocio educativo en el tiempo libre y las de apoyo al proyecto educativo de los centros dentro del horario escolar, dotando a los profesionales de mejores medios de información y comunicación.

En total, hay 45 Zonas Jóvenes en los Institutos de Educación Secundaria (34), en los Colegios Públicos Integrados (7) y en los Centros públicos de Educación Especial (4). La duración del contrato será de dos cursos escolares, más dos posibles prórrogas anuales.

La oferta municipal va dirigida a la población juvenil de entre 12 y 18 años de los centros de Educación Secundaria y Colegios Públicos Integrados.

En el caso de los Centros Públicos de Educación Especial, se destina a edades comprendidas entre los 3 y los 21 años.

El horario de trabajo en los centros será de 30 horas a la semana en los Centros de Educación Secundaria y en los Centros Públicos de Educación Especial, mientras que en los Colegios Públicos Integrados serán 25. En cuanto a las condiciones laborales de los trabajadores de las contratas, se vela por el cumplimiento de la legalidad vigente con un convenio firmado en el año 2021 y una actualización de las tablas salariales en 2023. En ningún caso se plantea este proceso con criterios de rentabilidad económica, sino que se busca una rentabilidad social para que los jóvenes utilicen los servicios y las actividades del Ayuntamiento.

Después de más de treinta años, se ha empezado un proceso para entender y conocer lo que realmente quieren los jóvenes, porque la sociedad ha cambiado mucho y actividades que se iniciaron hace treinta años poco tienen que ver con lo que piensan, sienten y necesitan ahora, ha manifestado la concejal de Juventud, Ruth Bravo.