Se renuevan farolas y se implementa tecnología LED en varias vías de Zaragoza con el objetivo de mejorar la seguridad y la eficiencia energética.
En la ciudad de Zaragoza, se están llevando a cabo importantes trabajos de renovación en el alumbrado público de varias calles.
Estas mejoras impactarán a las calles Monasterio de Samos, en el barrio de San José; Solidaridad, en Santa Isabel; y Lago, en La Almozara, que recientemente ha finalizado su renovación.
El área de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento está realizando estos trabajos con el propósito de aumentar la seguridad de los peatones y modernizar la iluminación urbana.
El consejero Víctor Serrano ha señalado que las antiguas farolas se encontraban en condiciones muy deterioradas y oxidadas, habiendo sido cubiertas por la vegetación durante el paso de los años.
Para solucionar esto, el Ayuntamiento está instalando nuevas columnas de alumbrado que son más bajas, con el objetivo de proporcionar una iluminación más adecuada en las aceras, lo que favorecerá la accesibilidad y la seguridad de los transeúntes.
La tecnología LED, que se está incorporando en estas renovaciones, no solo mejorará la visibilidad, sino que también es más eficiente y respetuosa con el medio ambiente.
De acuerdo con lo explicado por Serrano, se espera que esta modernización reduzca el consumo energético entre un 60% y un 85%, dependiendo de la calle.
Por ejemplo, en la calle Monasterio de Samos se prevé un ahorro del 71% en el consumo eléctrico.
Allí, se están desmontando 9 puntos de luz y se instalarán 12 nuevas farolas dobles: una que iluminará la calzada desde una altura de 6,5 metros, y otra más baja, a 4,5 metros, para iluminar las aceras.
En la calle Solidaridad, el ahorro previsto asciende al 74,5%. Asimismo, en la calle Lago, que ha visto concluida su renovación, las antiguas ocho farolas han sido reemplazadas y se han incorporado nuevas luminarias, resultando en un total de 14 dispositivos de alumbrado con una altura que evita colisiones con las ramas de los árboles.
En esta última, la instalación de la tecnología LED permitirá reducir el consumo de energía en un 76%. Además, el Ayuntamiento tiene planes ambiciosos para el futuro.
Se prevé el lanzamiento de contratos en otoño destinados al plan Reluces, una iniciativa que permitirá sustituir un total de 10,000 puntos de luz en toda la ciudad, así como la modernización de 81 cuadros de mando.
Para financiar este plan, Zaragoza ha conseguido casi 10 millones de euros gracias a las ayudas europeas del programa Next Generation del IDAE y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
La implementación de este plan significará un avance significativo no solo en eficiencia energética, sino también en la sostenibilidad del servicio de iluminación urbana en Zaragoza.
A medida que estas mejoras se vayan ejecutando, se espera que la ciudad brinde un entorno más seguro y acogedor para todos sus ciudadanos.