En Zaragoza, el evento artístico Asalto regresa en su decimonovena edición y se traslada este año a uno de los distritos con mayor identidad de la ciudad: Torrero-La Paz.

Este multifacético barrio, que se encuentra al sur del municipio y está delimitado por el majestuosamente serpenteante Canal Imperial de Aragón y el río Huerva, destaca por su rica historia, diversidad cultural y amplias áreas verdes que lo convierten en un lugar emblemático de la capital aragonesa.

La historia de Torrero-La Paz es vibrante y está marcada por su esencia obrera.

En sus inicios, fue conocido por la actividad de las canteras, y ocupó un papel crucial en la producción de yeso, así como en la ganadería.

A principios del siglo XX, el barrio se convirtió en un espacio de ocio para la burguesía zaragozana.

Sin embargo, esta dinámica cambió con el tiempo, y el barrio se transformó en un lugar de acogida para inmigrantes, principalmente provenientes del entorno rural aragonés.

Durante la Guerra Civil Española, Torrero-La Paz fue un refugio para republicanos, y su historia está también marcada por la existencia de una cárcel y, curiosamente, por haber albergado dos cines que ofrecieron entretenimiento a sus residentes.

Además, es el lugar de nacimiento del famoso club de fútbol Real Zaragoza, que ha tenido un papel importante en la historia deportiva de la ciudad.

Muchos de los actuales residentes del barrio han crecido en sus tradicionales casas de adobe, y algunos de los personajes ilustres que han pasado por la zona ahora descansan en su cementerio.

Entre los espacios naturales que adornan Torrero-La Paz, se destacan los Pinares de Venecia, que aportan sombra y frescura, convirtiéndose en un lugar ideal para el esparcimiento.

Al ser uno de los barrios con mayor carácter reivindicativo de Zaragoza, goza de una vida cultural vibrante, que se pone de manifiesto a través de diversos eventos y festividades locales, como las celebraciones en honor a San Antonio de Padua y la tradicional 'Bajada del Canal'. Este 2024, del 13 al 22 de septiembre, el barrio se prepara para recibir a Asalto, que promete llenar sus calles y medianiles de vida, color y, sobre todo, arte.

Durante esos días, creadores locales, nacionales e internacionales ocuparán el espacio urbano, convirtiendo a Torrero-La Paz en un auténtico escaparate de cultura y expresión artística.

Los vecinos y visitantes tendrán la oportunidad de disfrutar de murales, actuaciones y otras formas de arte que rendirán homenaje a la memoria y esencia del barrio.

Asalto se propone no solo embellecer el entorno, sino también fomentar un diálogo entre la comunidad y los artistas, resaltando la rica herencia cultural de un barrio que ha sabido adaptarse a los cambios, pero que a la vez mantiene su identidad y su espíritu comunitario.