El Ayuntamiento de Sevilla comienza la fase final de pruebas del tranvía en la ciudad, con el objetivo de poner en servicio el nuevo tramo en junio.
En la ciudad de Sevilla, el Ayuntamiento ha iniciado este lunes la última etapa de pruebas del tranvía, con la particularidad de que todos los vehículos en servicio realizarán el trayecto hasta la parada de Eduardo Dato.
Durante este periodo, el tramo entre San Bernardo y Eduardo Dato se realizará sin pasajeros en ambas direcciones, mientras se pone en tensión la catenaria para la tracción eléctrica.
Esta fase de pruebas, que durará al menos tres semanas, permitirá preparar al personal de conducción para comenzar a prestar el servicio con pasajeros en el nuevo tramo a partir del mes de junio.
La llegada a la parada de Luis de Morales se verá retrasada debido a las obras del proyecto del Corredor Verde que se están llevando a cabo en esa zona.
La ampliación del tranvía hasta Nervión ha implicado la construcción de una doble vía de 1,4 kilómetros de largo, con los correspondientes elementos de seguridad y señalización.
El coste total de estas obras y equipamientos ha sido de 23 797 898 euros, financiados en un 80 % por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) en el marco del Programa Operativo FEDER de crecimiento sostenible 2014-2020. Esta ampliación incluye tres nuevas paradas: San Francisco Javier, Eduardo Dato y Luis de Morales, dotadas de diversas comodidades para los usuarios como máquinas expendedoras de billetes, teleindicadores de información y cámaras de videovigilancia.
En cuanto a la electrificación, se han utilizado 43 postes de catenaria y 7200 metros de cableado.
La ejecución de las obras ha sido crucial para garantizar el correcto funcionamiento y la seguridad del tráfico en la zona, especialmente en el paso inferior del giro de Avda.
Ramón y Cajal a Avda.
San Francisco Javier.
Con esta ampliación, se espera mejorar la calidad del servicio de transporte público en la ciudad y conectar más eficientemente diferentes zonas.