El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, participó en la emblemática regata Sevilla-Betis, que en su edición número 59 recuperó su trazado tradicional y reunió a múltiples categorías. La prueba refleja los valores de deportividad y rivalidad entre los clubes, consolidándose como un evento clave en la ciudad.
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, no quiso perderse la oportunidad de asistir a esta emblemática prueba, que en esta ocasión volvió a su trazado clásico con la línea de meta ubicada frente a la Torre del Oro, uno de los monumentos más icónicos de la ciudad.
La regata, que tiene sus raíces en una rivalidad histórica entre los dos clubes más destacados de la ciudad, reunió a tripulaciones masculinas y femeninas en diferentes categorías, consolidándose como un símbolo de #deporte y convivencia en Sevilla.
La competición en categoría absoluta masculina fue dominada por el equipo del #Sevilla FC, que logró su primera victoria en varias ediciones, rompiendo así una racha de 14 triunfos consecutivos del Betis desde 2011.
Con esta victoria, los sevillistas ampliaron su ventaja en el marcador global, consolidándose con un total de 31 victorias frente a las 28 del equipo verdiblanco.
En la categoría femenina, la tripulación del equipo femenino del Betis consiguió su octava victoria consecutiva, incrementando la diferencia en el balance histórico hasta un 21-15 a favor de las béticas.
El triunfo en esta categoría reafirma la creciente competitividad y el nivel de las deportistas del equipo verdiblanco.
El alcalde Sanz resaltó durante su intervención la importancia de esta prueba, calificándola como un “clásico imprescindible en el calendario deportivo de la ciudad”.
Además, subrayó que la regata es un ejemplo de valores deportivos, donde la competitividad y la rivalidad se combinan con el respeto y el compañerismo.
“El derbi del río nos enseña cada año la grandeza del deporte y su capacidad para unir a la comunidad”, afirmó.
Asimismo, además de las categorías principales, se celebraron regatas en las modalidades de aspirantes y veteranos, en las que también participó una gran cantidad de deportistas.
Mientras que el Sevilla logró victoria en veterano femenino y aspirante masculino
En estas categorías, el Betis triunfó en veterano masculino y aspirante femenino, mientras que el Sevilla logró victoria en veterano femenino y aspirante masculino.
Las pruebas se realizaron en distancias cortas, de 500 metros, aptas para todas las edades y niveles.
Tras la finalización de las regatas, se llevó a cabo la entrega de premios en un acto en el que las tripulaciones vencedoras levantaron el característico ‘cocodrilo’, una figura de peso que representa el espíritu de lucha y victoria.
En las categorías masculinas, el trofeo era un cocodrilo de 50 kg de peso, mientras que en féminas, se entregó un modelo en forma de ocho con timonel, de 70 kg.
Desde sus inicios, esta tradicional competencia ha sido un punto de encuentro para deportistas, aficionados y espectadores que disfrutan cada año de la emoción del deporte en un entorno privilegiado.
La regata Sevilla-Betis no solo promueve la actividad física y la camaradería, sino que también fortalece la identidad cultural y deportiva de Sevilla, ciudad que ha sido epicentro de diversas tradiciones atléticas a lo largo de su historia.
La participación en este evento refleja el amor de los sevillanos por su historia y por celebrar en la calle sus pasiones deportivas, que tras siglos de tradición, siguen siendo un orgullo para la comunidad.
En términos económicos, la organización y participación en eventos como esta regata generan un impacto positivo en el sector turístico y hostelero de la ciudad, que en los meses previos y posteriores a la competición experimenta un aumento en la afluencia de visitantes.
