El Ayuntamiento de Sevilla ha concluido la recuperación del anaquel de la Glorieta de Bécquer, gravemente dañada por actos vandálicos en 2022, en un esfuerzo por preservar su patrimonio histórico. La intervención incluyó la reconstrucción meticulosa de la pieza, utilizando técnicas modernas y reproducciones precisas para mantener su integridad original.

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En Sevilla, el Consistorio, a través del Área de Arbolado, Parques y Jardines, ha culminado los trabajos de restauración y restitución del anaquel de la Glorieta de Bécquer, situada en el emblemático Parque de María Luisa.

Esta escultura, que forma parte del patrimonio artístico y cultural de la ciudad, fue gravemente dañada tras un acto vandálico ocurrido en 2022. La pieza, que data de 1911 y fue diseñada por el arquitecto Aníbal González, en colaboración con el escultor Lorenzo Coullant Valera, había sufrido fragmentaciones que la dejaron muy deteriorada.

La restauración ha sido un desafío que implicó el ensamblaje de 17 fragmentos en un proceso que requirió técnicas avanzadas, incluyendo el uso de espigas de fibra de vidrio y resinas epoxi diseñadas especialmente para trabajos en piedra.

Además, se reprodujeron piezas perdidas mediante moldes precisos, asegurando así la fidelidad al diseño original. La operación de remonte y colocación fue cuidadosa para devolver la obra a su ubicación original en la glorieta, permitiendo a los visitantes y residentes disfrutar nuevamente de este bien patrimonial.

La delegada de Arbolado, Parques y Jardines, Evelia Rincón, destacó que “la recuperación del anaquel de la Bécquer refleja el compromiso de la administración local con la protección y puesta en valor del patrimonio histórico de Sevilla”.

Las acciones en la Glorieta no terminan allí; las próximas semanas también se iniciarán trabajos en otras figuras que integran este espacio, así como en la restauración de la Glorieta de Luis Montoto, igualmente afectada por actos de vandalismo.

En estos casos, se están llevando a cabo operaciones de reproducción mediante moldes y sustitución de elementos perdidos, siempre respetando el diseño original.

Estas tareas forman parte de un plan pionero impulsado por el gobierno municipal de José Luis Sanz, destinado a conservar y restaurar esculturas y elementos ornamentales en los parques históricos de la ciudad.

Hasta la fecha, ya se han recuperado distintas figuras, como las de Doña Sol y Doña Elvira, además de las esculturas en la Glorieta de la Infanta María Luisa, las águilas del Pabellón Real y otras en la Glorieta de la Concha, entre otros.

El proceso de conservación incluye limpieza mecánica, química, eliminación de pintadas y protección contra grafitis, además de sellado de fisuras y tratamientos específicos para metales, como la limpieza de óxidos y la aplicación de capas anticorrosivas.

Los trabajos también contemplan la extracción y protección de piezas en riesgo de desprendimiento. Todo este esfuerzo ha sido posible gracias a un modelo de mantenimiento preventivo, que permite responder en un máximo de 48 horas ante cualquier percance.

Evelia Rincón afirmó que “la conservación del patrimonio en nuestros parques históricos es una prioridad para este gobierno, y mediante este nuevo sistema, podemos garantizar que las esculturas y glorietas sigan siendo referentes culturales y turísticos en Sevilla, asegurando su conservación para las futuras generaciones”.

La combinación de tecnología y compromiso ha permitido que las joyas escultóricas de la ciudad mantengan su belleza y significado a lo largo del tiempo, en línea con la historia que Sevilla desea preservar y promover.