Las lluvias intensas en Kerrville, Texas, dejan un balance devastador con 70 víctimas mortales y 37 personas desaparecidas, en su mayoría menores de edad. La comunidad enfrenta una crisis sin precedentes mientras las autoridades intentan gestionar la emergencia.

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Según las cifras oficiales, el número de víctimas mortales ha aumentado a 70, mientras que 37 personas permanecen desaparecidas. La mayoría de las víctimas eran niños y adolescentes que participaban en un campamento de verano a las orillas del Río Guadalupe, una zona que en los últimos días sufrió una tormenta de gran intensidad.

Supuestamente, esta tragedia se sumó a una serie de eventos climáticos extremos que han azotado a Estados Unidos en los últimos años. La región, conocida por su belleza natural, ha sido afectada por fenómenos meteorológicos cada vez más frecuentes y severos, atribuidos por expertos al cambio climático global.

Texas sufrió una de las peores sequías de su historia

En 2015, por ejemplo, #Texas sufrió una de las peores sequías de su historia, seguida en 2017 por una serie de tormentas que provocaron #inundaciones en varias ciudades.

Dentro de las víctimas fatales se encuentra Julian Ryan, un joven de 27 años que, supuestamente, era un padre dedicado y esposo amoroso. Se reporta que murió intentando salvar a su familia después de que su casa se inundara rápidamente. La prometida de Julian, Christinia Wilson, relató que, tras comenzar las lluvias, su vivienda empezó a llenarse de agua en cuestión de minutos. Según Wilson, su pareja actuó con valentía, llegando incluso a romper una ventana con la esperanza de que su familia pudiera escapar.