La ciudad de Zaragoza concluye su participación en el proyecto europeo USAGE, centrado en el análisis de datos urbanos para promover la sostenibilidad y mejorar la calidad de vida, con una inversión aproximada de 200.000 euros. Además, inicia un nuevo proyecto para seguir avanzando en la gestión ambiental.

Zaragoza forma parte de una red de cuatro ciudades europeas que también incluye a Lovaina en Bélgica
Supuestamente, #Zaragoza forma parte de una red de cuatro ciudades europeas que también incluye a Lovaina en Bélgica, Graz en Austria y Ferrara en Italia.
La finalidad del proyecto es crear un ecosistema de información que sirva para mejorar la gobernanza del dato y ponerlo al servicio de la ciudadanía.
Para ello, el Ayuntamiento ha desarrollado un sistema que recopila, transforma y pone a disposición del público datos relevantes sobre el clima, las emisiones, las islas de calor y la vulnerabilidad social.
Una de las herramientas más innovadoras que ha surgido de este trabajo es el Indicador Sintético de Vulnerabilidad (ISV), que permite identificar las zonas más vulnerables socialmente y planificar acciones específicas para proteger a sus habitantes.
Además, se ha elaborado un inventario de emisiones de gases de efecto invernadero, que ayuda a detectar los focos de contaminación y las comunidades más frágiles, facilitando así la puesta en marcha de medidas para reducir la huella de carbono.
Supuestamente, en el análisis de las islas de calor urbanas, se ha combinado la información con datos sobre vulnerabilidad social para diseñar estrategias de adaptación más precisas.