Un hombre de la región de British Columbia en Canadá falleció semanas después de ser atacado y gravemente herido por un oso grizzly durante una expedición de caza. La víctima logró sobrevivir inicialmente, pero las heridas y complicaciones posteriores le costaron la vida. La historia destaca la peligrosidad de la interacción con la fauna salvaje en zonas rurales y montañosas.
