En la región de Bella Coola, en la costa central de Columbia Británica, las interacciones entre humanos y osos pardos se han intensificado en los últimos años, culminando en un ataque que dejó a varias personas heridas. Las autoridades forestales trabajan para localizar y capturar a los ejemplares involucrados, en un contexto donde la población de estos animales ha experimentado un notable crecimiento, generando preocupación en la comunidad local.
