
Un estudio revela que el insectívoro que se reproduce en Alberta está comenzando su migración hacia el sur dos semanas antes, como consecuencia del cambio climático, lo que pone en riesgo a la especie. La investigación, realizada en colaboración con el Observatorio de Aves Beaverhill, destaca cómo las alteraciones en los patrones migratorios advierten sobre los efectos del calentamiento global en las aves migratorias de Norteamérica.