
La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal itinerante dedicado a cometer robos con violencia y hurtos amorosos de joyas y relojes. Los miembros del grupo, relacionados por lazos familiares, actuaban en parejas y alquilaban casas para desplazarse a zonas turísticas en busca de víctimas potenciales. Utilizaban vehículos a nombre de terceros para dificultar la labor policial. En total, se les imputa ocho hurtos y robos con violencia por un valor aproximado de 60.000 euros.