El uso de licencias de conducir falsas en Argentina continúa en aumento, con más de 3,000 casos detectados en lo que va del año. Las autoridades refuerzan los controles y las multas pueden alcanzar hasta 1.300 euros. La falsificación de documentos de conducción es un delito grave, con implicancias penales y económicas elevadas, además de la retención del vehículo.
