
Un estudio realizado por investigadoras del Hospital General Universitario Gregorio Marañón revela que el cerebro de las madres experimenta cambios anatómicos durante el embarazo, los cuales están relacionados con la neuroplasticidad. Estos cambios persisten hasta los seis años posparto y son similares a los que ocurren durante la adolescencia. El conocimiento de estos cambios es esencial para prevenir y tratar patologías perinatales como la depresión posparto.