
El Servicio Postal Británico atraviesa uno de los mayores escándalos de justicia en la historia del país, después de que un sistema de IT defectuoso haya destruido las vidas y reputaciones de cientos de subdirectores y subdirectoras de sucursales en el Reino Unido. El primer ministro Rishi Sunak ha calificado este hecho como uno de los mayores errores judiciales de la nación.