
Cada vez más consumidores optan por la modalidad de comprar ahora y pagar después, una tendencia en aumento que ha cobrado fuerza durante la temporada de compras navideñas. Este método financiero, que permite adquirir productos y aplazar el pago, se ha vuelto especialmente popular entre los adultos mayores y los jóvenes, quienes buscan flexibilizar sus finanzas en un contexto de inflación y altos precios. Expertos advierten sobre los riesgos y beneficios de esta práctica, que podría influir en la economía personal y en la política de consumo en los próximos años.