Supuestamente, muchos compradores están considerando adquirir vehículos fuera de su estado natal debido a los altos precios y la escasez de stock en el mercado local. La tendencia, facilitada por plataformas digitales y servicios de envío, plantea tanto ventajas como riesgos, y algunos expertos advierten sobre las precauciones necesarias para evitar sorpresas desagradables. Este fenómeno no es nuevo, y en Estados Unidos, por ejemplo, ha tenido un impacto significativo en el mercado de coches usados en los últimos años.
