
La polémica entre los clubes de Independiente y Universidad de Chile continúa, con acusaciones cruzadas tras los incidentes violentos ocurridos hace dos semanas, y una disputa legal que involucra a la Conmebol. Mientras ambos equipos esperan una resolución, los dirigentes mantienen posiciones enfrentadas y se recriminan mutuamente, en un contexto marcado por la violencia y la polémica institucional.