
La Primera División argentina registra una de las cifras más bajas de goles en su historia reciente, enfrentando una crisis goleadora que preocupa a jugadores, entrenadores y fanáticos por igual.
La Primera División argentina registra una de las cifras más bajas de goles en su historia reciente, enfrentando una crisis goleadora que preocupa a jugadores, entrenadores y fanáticos por igual.