
El Ayuntamiento de Zaragoza ha puesto en marcha un plan de inspección de 277 inmuebles en los barrios de Zamoray, Pignatelli y el Casco Histórico, con el objetivo de garantizar su seguridad y conservación. Las primeras visitas ya han comenzado, incluyendo edificios con más de 150 años de antigüedad, en un esfuerzo por prevenir riesgos y preservar el patrimonio urbano.