
Las obras de la primera etapa de renovación de las riberas del río Huerva en Zaragoza están llegando a su fin, preparando el terreno para la segunda fase que mejorará espacios verdes y la integración urbana con el cauce fluvial. Las intervenciones incluyen la renovación de una tubería de saneamiento de 1 metro de diámetro, enterrada a profundidades de hasta 9 metros, y afectarán al tráfico y movilidad en la zona durante los próximos meses.