La ciudad de València lanzará una de sus mayores obras urbanas en más de veinte años, remodelando las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta en solo 14 meses, una intervención que cambiará radicalmente su paisaje y movilidad.
Supuestamente, la ciudad de València se prepara para llevar a cabo una de las intervenciones urbanas más significativas de las últimas décadas, centrada en la remodelación de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta.
La inversión, que supuestamente alcanza los 22 millones de euros, equivalentes a aproximadamente 24,5 millones de dólares o unos 20 millones de libras esterlinas, será destinada a transformar estas importantes arterias viales en un proyecto que, según las autoridades, se realizará en un tiempo récord de solo 14 meses.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, ha declarado que, a diferencia de anteriores proyectos que podrían haber tardado más de dos años y medio, esta obra se ejecutará en menos de la mitad del tiempo, con un proceso que empieza a señalizarse desde finales de junio y que se dividirá en varias fases para garantizar la continuidad del tráfico y el acceso a la movilidad de los residentes.
La intervención comprende la renovación del pavimento, la creación de nuevas zonas verdes y parques infantiles, además de la instalación de un carril segregado para bicicletas de 2,4 kilómetros, presuntamente una de las mayores mejoras en infraestructura ciclista en la ciudad en los últimos años.
Supuestamente, esta remodelación afectará a una superficie cercana a los 100.000 metros cuadrados y más de 2 kilómetros de extensión, transformando radicalmente la apariencia de estas avenidas que conectan varios distritos importantes.
La iniciativa no solo contempla mejoras en la movilidad y accesibilidad, sino también en la calidad ambiental, con la incorporación de pavimento fonoabsorbente que reducirá significativamente los niveles de contaminación acústica.
Para minimizar los trastornos en el tráfico, las autoridades han diseñado un plan de desvíos con más de 45 señalizaciones, incluyendo carteles con códigos QR que permiten a los residentes consultar en tiempo real toda la información sobre los cortes y rutas alternativas en una web específica.
Además, se colocarán carteles en zonas estratégicas, como portales, comercios y paradas de transporte público, con información actualizada y enlaces para facilitar el acceso a los datos.
Desde el inicio de las obras, prevista para el 30 de junio, se realizarán trabajos simultáneos en ambos extremos de las avenidas, comenzando en los tramos entre el puente de Campanar y la calle de Cartagena, y en la zona entre la calle Sant Vicent y la calle Jesús.
La ejecución se hará por fases, con tramos de aproximadamente 500 metros, de modo que se garantice el paso de vehículos y transporte público en todo momento.
Supuestamente, esta intervención será la mayor en términos de superficie y alcance en más de veinte años en la ciudad, impactando positivamente en la movilidad urbana y en la calidad de vida de los residentes.
Se instalarán también 15 nuevas paradas de autobús, todas ellas adaptadas a las necesidades de diferentes usuarios, y se renovará toda la iluminación pública, sumando unas 265 luminarias modernas que garantizarán una mejor visibilidad y seguridad.
Por otro lado, los vecinos tendrán a su disposición información actualizada a través de paneles con códigos QR que podrán escanear desde sus teléfonos, facilitando así el acceso a datos en tiempo real sobre el avance de las obras y los posibles desvíos.
La remodelación también contempla la incorporación de más pasos de peatones, pasando de 24 a 26, con una distancia máxima de 110 metros entre cada uno, mejorando la seguridad y accesibilidad para los transeúntes.
En definitiva, esta ambiciosa renovación urbana pretende transformar radicalmente la movilidad, el entorno y la calidad de vida en estas avenidas emblemáticas, convirtiéndose en un referente de la planificación urbanística moderna en València.
La ciudad, que históricamente ha sido un ejemplo de innovación en infraestructura, continúa así su camino hacia una movilidad más sostenible y amigable con el medio ambiente, en línea con las tendencias globales de urbanismo inteligente y resiliente.