El Ayuntamiento propone modificar el plan especial de Campanar para reducir las alturas en Beniferri y Campanar, además de facilitar zonas para fan zones en eventos deportivos, en una apuesta por preservar el carácter histórico y potenciar la actividad ciudadana.
La Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento ha presentado una serie de propuestas destinadas a modificar y ajustar el Plan Especial del Área Funcional número 4 de Campanar, en un esfuerzo por preservar la identidad histórica de los barrios y adaptarse a las necesidades actuales de la ciudad.
Entre las medidas más relevantes se encuentra la reducción de alturas en los núcleos antiguos de Beniferri y Campanar, con el objetivo de integrar nuevos edificios al estilo constructivo tradicional de estas zonas.
Estas propuestas se enmarcan en una línea de actuación que busca mantener la esencia de los centros históricos, evitando la proliferación de edificaciones de altura que puedan alterar su carácter y paisaje urbano.
Desde hace décadas, el urbanismo en Valencia ha estado marcado por una constante búsqueda de equilibrio entre el crecimiento y la conservación. La historia de estos barrios refleja una evolución que va desde las casas tradicionales de una o dos plantas hasta las estructuras modernas de mayor altura, muchas de ellas construidas en los últimos años sin un plan que garantizara su integración estética y funcional.
La propuesta del Ayuntamiento, que ahora será sometida a exposición pública, contempla reducir las alturas de los edificios en el núcleo antiguo a un máximo de dos plantas: planta baja, primer piso y cámara, en consonancia con el estilo histórico de la zona.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, explicó que en la reunión mantenida la semana pasada con representantes vecinales se acordó «reajustar el plan para que refleje mejor la historia y la idiosincrasia de estos barrios, además de reorganizar los espacios de las unidades de ejecución para garantizar que se mantengan dotaciones públicas y zonas verdes».
Giner añadió que estas modificaciones permitirán no solo conservar la estética tradicional, sino también mejorar la calidad de vida de los residentes, quienes podrán seguir disfrutando de un entorno armonioso y coherente con su patrimonio.
Por otro lado, el proceso incluye un período de exposición pública de 20 días desde la publicación en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).
Tras este período, el expediente será enviado al Servicio Territorial de Cultura de la Generalitat para su informe, que será determinante para la aprobación provisional por parte del Pleno municipal.
Posteriormente, la propuesta será remitida a la Comisión Territorial de Urbanismo para su aprobación definitiva.
Además de la revisión de las alturas, la Comisión de Urbanismo ha planteado también una modificación en la Ordenanza de Contaminación Acústica para facilitar la creación de fan zones, espacios habilitados en las proximidades de recintos deportivos para concentraciones de seguidores en eventos deportivos.
Esta medida busca adaptarse a la creciente demanda de espacios públicos donde los aficionados puedan disfrutar de los partidos en un ambiente controlado.
El cambio en la ordenanza establece que los promotores de estos eventos deberán solicitar autorización previa, que especificará las condiciones de horario y nivel sonoro permitidos.
La regulación afectará a recintos como el Estadio de Mestalla, la Fonteta de Sant Lluís, el Pabellón València Arena y la Plaza de Toros, entre otros.
Los organizadores estarán obligados a cumplir con las limitaciones establecidas en la normativa, garantizando que las actividades se desarrollen en un marco de respeto por los vecinos y el entorno.
Estas iniciativas reflejan el compromiso del Ayuntamiento por equilibrar el desarrollo urbano con la protección del patrimonio y la calidad de vida de los ciudadanos.
La historia de Valencia muestra que, desde su fundación en el siglo XV, la ciudad ha sabido adaptarse a los cambios sin perder su esencia, y ahora busca seguir ese camino mediante propuestas que combinan modernidad y tradición, siempre pensando en el bienestar de sus residentes y en la conservación de su legado histórico.