Durante los primeros cuatro meses del año, el consistorio ha invertido una cantidad significativa en asfaltado, mejorando la infraestructura y la seguridad de numerosos barrios.
En los primeros meses del año, el Ayuntamiento ha realizado una importante inversión para mejorar la red vial de la ciudad, destinando más de 1,5 millones de euros, aproximadamente 1.680.000 euros, en trabajos de asfaltado y mantenimiento de calles. Con esta iniciativa, se ha logrado pavimentar un total de 76.264 metros cuadrados en 33 vías urbanas distribuidas en diversos distritos y barrios, reforzando así el compromiso municipal con una ciudad más segura y accesible.
Desde hace décadas, la inversión en infraestructura urbana ha sido una prioridad para los ayuntamientos, ya que no solo mejora la estética de la ciudad, sino que también garantiza un tránsito más seguro y eficiente.
En esta ocasión, el distrito que ha concentrado la mayor parte de las obras ha sido Poblats del Nord, donde se han asfaltado varias calles, incluyendo dos en la pedanía de Carpesa.
En este distrito, las obras han contribuido a reducir la presencia de baches y mejorar la calidad de vida de sus residentes.
Además, Poblats del Sud ha sido otro de los focos de intervención, con trabajos en varias vías en zonas como El Saler, La Torre y El Palmar. Estas actuaciones no solo han mejorado la superficie de tránsito, sino que también han contribuido a la revitalización de estas áreas, muchas de las cuales tienen un valor histórico y cultural importante en la ciudad.
Uno de los puntos destacados ha sido en Quatre Carreres, donde en La Punta se han asfaltado tres calles, sumando más de 20.000 metros cuadrados en superficie. Entre las calles con mayor superficie asfaltada se encuentran el Camí Pou d’Aparici, con aproximadamente 8.049 metros cuadrados, y la calle Mosén Palanca-Camino Caminot, con cerca de 7.575 metros cuadrados. Estas obras representan un esfuerzo considerable para mejorar la movilidad y seguridad en esas zonas.
El concejal de Urbanismo, Juan Giner, ha explicado que todas estas acciones se han llevado a cabo con el objetivo de reparar calles deterioradas por el tráfico y el paso del tiempo, incrementando así la seguridad vial y facilitando la movilidad urbana.
“Estas obras también fomentan la revitalización de los barrios, creando entornos más seguros y agradables para sus habitantes”, afirmó.
Además de las principales arterias viales, el Ayuntamiento ha intervenido en calles más pequeñas y en zonas específicas, como Ciscar y Joaquím Costa en el distrito de L’Eixample, o la calle Santíssima Creu en la pedanía de Benifaraig, en Poblats del Nord.
Estas acciones reflejan el compromiso del consistorio con un desarrollo urbano equilibrado y de calidad.
Históricamente, la inversión en infraestructura urbana ha sido una de las principales prioridades municipales, ya que influye directamente en la calidad de vida de los ciudadanos y en la competitividad de la ciudad.
La modernización de las calles y la mejora de la movilidad contribuyen a hacer de la ciudad un lugar más atractivo para residentes, visitantes y empresas.
En conclusión, con una inversión que ronda los 1,680,000 euros, el Ayuntamiento continúa su labor de mantener y mejorar la red vial urbana, consolidando su compromiso con el desarrollo sostenible y equitativo de todos los barrios.
Estas obras no solo representan una mejora en la infraestructura, sino también una apuesta por un urbanismo más seguro, accesible y amigable para todos.