La ciudad de València alcanza un récord de ocupación hotelera durante la Semana Santa, impulsada por el buen tiempo y las reservas de última hora, con precios que superan los 170 euros por noche en promedio.
Durante la pasada Semana Santa, la ciudad de València ha logrado registrar una de las tasas de ocupación hotelera más altas en su historia, alcanzando un promedio del 91% en las cuatro noches principales, según datos de la Fundación Visit València.
Este porcentaje representa una significativa mejora respecto a las previsiones iniciales y refleja un aumento en comparación con el 71% registrado en la misma temporada del año anterior, consolidando a la urbe como uno de los destinos preferidos del Mediterráneo en esta época.
Uno de los aspectos más destacados de esta temporada ha sido el día de Viernes Santo, que ha llegado a una ocupación del 98%, situándose como la jornada con mayor afluencia y reservas en la ciudad.
Este pico se atribuye, en gran medida, a las favorable condiciones meteorológicas que han motivado a numerosos viajeros a hacer reservas de última hora, elevando la ocupación en aproximadamente 20 puntos porcentuales respecto a las previsiones iniciales.
La tendencia de reservas de última hora, que ya se había observado en años anteriores, ha sido un factor decisivo para estos excelentes resultados.
Paula Llobet, concejala de Turismo y presidenta de la Fundación Visit València, ha señalado que, tras unos meses complicados por los efectos de fenómenos meteorológicos adversos en los mercados internacionales, los datos de esta Semana Santa muestran la fortaleza de la ciudad como destino turístico.
Llobet ha destacado que estos resultados no solo benefician al sector hotelero, sino que también representan una oportunidad para avanzar hacia un modelo de turismo más sostenible, que combina crecimiento económico con un equilibrio medioambiental y social.
En cuanto a los precios, el coste medio por noche durante estos días ha sido de aproximadamente 167 euros, cifra que supera tanto las expectativas iniciales de 154 euros como el precio de 164 euros del año pasado.
Este incremento de más de 10 euros en comparación con 2024 refleja una mayor consolidación de la oferta turística de València y una demanda sostenida, a pesar de la incertidumbre que ha prevalecido en los mercados internacionales y nacionales durante los últimos meses.
El buen funcionamiento de las conexiones de transporte también ha sido un factor clave en estos resultados. La ciudad cuenta con una red de vuelos que conecta con más de 100 destinos, además de una infraestructura ferroviaria que facilita el acceso desde distintas partes del país.
La excelente conectividad ha reforzado la posición de València como un destino urbano de referencia en el Mediterráneo, especialmente durante la temporada primavera-verano.
Desde el punto de vista cultural, gastronómico, deportivo y de ocio, la oferta de la ciudad ha sido otro de los aspectos que ha contribuido a atraer a turistas nacionales e internacionales.
La combinación de un clima favorable, una amplia variedad de actividades y una infraestructura moderna hacen de València un destino que continúa creciendo en popularidad.
Estos resultados positivos permiten al sector turístico mirar con optimismo hacia el verano, consolidando a València como un destino preparado para afrontar los retos del turismo del futuro, con un enfoque en la sostenibilidad y la calidad de la experiencia para los visitantes.
La tendencia de recuperación y crecimiento en ocupación y precios parece indicar que la ciudad seguirá siendo una de las principales opciones en el calendario turístico del Mediterráneo en los próximos meses.