València cierra 2025 con incremento de la capacidad aérea y anuncia nuevas rutas para 2026, con foco en desestacionalización y promoción internacional.

València cierra 2025 con una evolución clara de su conectividad aérea. El aeropuerto de Manises ha cerrado el año con un incremento de alrededor del 4% en la capacidad de llegadas respecto al ejercicio anterior, una alza que se nota tanto en la temporada de invierno como en verano.

En números, se acumularon 2,6 millones de plazas disponibles en la temporada invernal y se superaron los 4,2 millones en los meses estivales, cifras que consolidan una trayectoria de crecimiento sostenido y una diversificación de mercados que evita depender de un único segmento.

Este comportamiento, atribuido en gran medida a la estrategia de desestacionalización impulsada por Visit València, sitúa a la ciudad como destino bien conectado y abierto al mundo, con aerolíneas que mantienen su confianza incluso en contextos de volatilidad económica.

Para 2026, la empresa pública Visit València, en coordinación con el Ayuntamiento y los operadores del aeropuerto, propone ampliar la conectividad con nuevas rutas internacionales y nacionales.

Entre las novedades más destacadas figuran la apertura de una ruta de ITA Airways con Roma y un vuelo directo de Ryanair a Rabat, avances que sitúan a Valencia en el mapa de Norte de África y en la ruta sud-europea de conexiones.

A estas se suman enlaces hacia Helsinki, Londres (Luton y Gatwick), Venecia, Florencia, Lille y Melilla, en un despliegue coordinado con aerolíneas como Finnair, Wizz Air, Volotea y Air Nostrum.

Un hito importante será, según la planificación, la inauguración de vuelos directos a las cuatro capitales escandinavas: Copenhague, Oslo, Estocolmo y Helsinki, un salto estratégico que refuerza la presencia de la ciudad en un mercado de alto valor y sensibilidad al medioambiente.

Con esa mirada, la campaña de promoción no se limita a las ciudades europeas, sino que también se refuerza con acciones específicas en Dinamarca, Suecia, Noruega y Finlandia, acompañando la implementación de las nuevas rutas y la proyección en mercados de largo radio mediante alianzas con Madrid para Estados Unidos y Canadá.

La concejala de Turismo, Innovación y Captación de Inversiones y presidenta de Visit València, Paula Llobet, ha subrayado que una conectividad sólida aporta estabilidad y facilita la vida de los residentes, al ofrecer más vuelos, mejores precios y mayor facilidad para viajar desde València a lo largo de todo el año.

En paralelo, la ciudad mantiene su estrategia de atracción de inversiones e innovación, con proyectos de desarrollo de infraestructura aeroportuaria y mejoras en la experiencia del viajero.

Presuntamente, las tarifas de lanzamiento para las nuevas rutas podrían oscilar entre 60 y 150 euros por trayecto, dependiendo de cuánta anticipación tenga el comprador y de la demanda.

Supuestamente, algunas promociones podrían situar precios cercanos a los 40 euros en campañas piloto, siempre condicionado por cupos y restricciones.

Aun cuando esos montos sean plausibles, hay que entender que el mercado de billetes aéreos es volátil y sujeto a cambios de última hora. Históricamente, València ha trabajado para convertir al aeropuerto de Manises en una plataforma de servicios multimodales, con inversiones que han ido renovando su infraestructura y capacidades a lo largo de las últimas dos décadas, con énfasis en desestacionalización y diversificación de mercados: este marco histórico ha permitido, supuestamente, que hoy la ciudad pueda absorber incrementos de tráfico sin perder calidad en la experiencia del viajero.