El Ayuntamiento de València destina aproximadamente 3,9 millones de euros para potenciar su plataforma digital y la Oficina de Proyectos de Transformación Digital, buscando mejorar la toma de decisiones mediante herramientas de Big Data y ciudades inteligentes.

El Ayuntamiento de València ha anunciado una importante inversión de cerca de 3,9 millones de euros (unos 4,3 millones de dólares) en la contratación de servicios tecnológicos que buscan modernizar y optimizar la gestión urbana de la ciudad.

La iniciativa comprende la Plataforma VLCi y la Oficina de Proyectos de Transformación Digital, dos pilares fundamentales en la estrategia municipal para convertir a València en una ciudad más inteligente y eficiente.

Este proceso de licitación, que se ha abierto oficialmente por la Junta de Gobierno Local, contempla un contrato plurianual que se extenderá hasta 2028.

La convocatoria se divide en dos lotes diferenciados, cada uno destinado a uno de los servicios, con una duración inicial de tres años y posibilidad de prórroga por otros dos años adicionales.

La inversión total prevista refleja la importancia que el Ayuntamiento concede a la innovación tecnológica como herramienta para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos.

El portavoz municipal, Juan Carlos Caballero, explicó que el objetivo principal es dotar a los servicios municipales de un soporte técnico y estratégico que permita transformar los problemas en proyectos concretos y soluciones eficientes en áreas clave como movilidad, gestión de residuos, eficiencia energética y vivienda.

“No se trata solo de implementar pantallas o tecnología superficial, sino de hacer las cosas con mayor sentido, escuchando a la ciudadanía y analizando los datos para tomar decisiones más inteligentes y precisas”, afirmó.

Desde su creación en 2013, la Plataforma VLCi ha sido uno de los proyectos estratégicos más relevantes en el ámbito de las ciudades inteligentes en España.

Su implementación, que empezó en 2014, ha supuesto la creación de un sistema avanzado de almacenamiento y procesamiento de datos que recopila información de diversas fuentes en un único repositorio.

Gracias a herramientas de Big Data, la plataforma permite analizar grandes volúmenes de datos para facilitar la toma de decisiones en tiempo real y con mayor precisión.

VLCi cumple con los estándares europeos FIWARE, lo que garantiza su compatibilidad y escalabilidad. La plataforma recopila datos provenientes de sensores, sistemas municipales y dispositivos desplegados en toda la ciudad. Entre sus principales funciones destacan la adquisición y distribución de información, la gestión de enormes volúmenes de datos, y el análisis estadístico y predictivo, que ayuda a anticipar problemas y mejorar la planificación urbana.

Por otro lado, la Oficina de Proyectos de Transformación Digital es responsable de brindar soporte técnico y estratégico al Servicio Municipal de la Ciudad Inteligente.

Esta oficina forma parte de la estrategia municipal para potenciar la eficiencia en la administración pública y ofrecer servicios urbanos más inteligentes y sostenibles.

Su labor es crucial para convertir la visión de una ciudad digital en realidad, apoyando a los técnicos municipales en la implementación de soluciones tecnológicas que mejoren la calidad de vida de los habitantes.

Históricamente, la apuesta por la tecnología en las ciudades españolas ha ido en aumento. Desde la primera implementación de sistemas de gestión de tráfico en Barcelona en los años 80 hasta los proyectos de redes inteligentes en Zaragoza o Málaga, la tendencia apunta a transformar las urbes en entornos más conectados y sostenibles.

La inversión del Ayuntamiento de València en este contexto refuerza su compromiso con la innovación y la transformación digital, alineándose con las metas europeas de ciudades inteligentes y sostenibles para 2030.

En definitiva, esta iniciativa representa un paso firme hacia una gestión urbana más moderna, eficiente y respetuosa con el medio ambiente, en beneficio de toda la ciudadanía valenciana.

La incorporación de estas tecnologías permitirá una mejor planificación, gestión y resolución de los problemas urbanos, facilitando una ciudad más habitable, segura y conectada para todos sus residentes.