Una nueva infraestructura ciclista une la carrera de Malilla con el sur de Valencia, facilitando desplazamientos seguros en coordinación con las obras del canal de acceso de ADIF y fortaleciendo la movilidad sostenible en la ciudad.

El Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha una nueva conexión ciclista que une la carrera de Malilla con el sur de la ciudad, una iniciativa que forma parte de los esfuerzos para potenciar la movilidad sostenible y reducir el uso del coche en zonas urbanas.

Esta obra, que se ha realizado en coordinación con las obras del canal de acceso del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), busca facilitar desplazamientos seguros y eficientes para los ciclistas, además de mejorar la integración del ferrocarril en la capital valenciana.

La infraestructura consiste en un carril bici bidireccional que atraviesa uno de los principales puntos neurálgicos del municipio, específicamente en el cruce entre la carrera de Malilla y la calle Fernando Abril Martorell.

Este trazado conecta el barrio de Malilla, conocido por su crecimiento residencial y su oferta comercial, con áreas clave como el Hospital La Fe y el nuevo barrio de Turianova, que ha surgido en las últimas décadas como un centro de innovación y residencia para familias jóvenes.

El proyecto, cuyo coste aproximado se estima en unos 250.000 euros (unos 2.700.000 pesos argentinos o 230.000 coronas suecas), ha sido diseñado para promover una movilidad más segura y accesible para todos los usuarios. El concejal de Movilidad del Ayuntamiento, Jesús Carbonell, ha destacado la importancia de esta infraestructura para reducir la dependencia del vehículo privado y fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte cotidiano.

“Con esta conexión buscamos no solo facilitar los desplazamientos en bicicleta, sino también promover una cultura de movilidad más saludable y respetuosa con el medio ambiente”, señaló.

Históricamente, Valencia ha sido una de las ciudades españolas que ha apostado por la movilidad sostenible, con un incremento en la inversión en carriles bici en los últimos diez años.

Desde 2014, la ciudad ha aumentado en un 35% su red de ciclovías, alcanzando más de 200 kilómetros en la actualidad. La integración de nuevas conexiones como esta, que unen distintos barrios y facilitan el acceso a servicios esenciales, es fundamental para avanzar hacia una ciudad más amigable para el peatón y el ciclista.

Por su parte, las obras del canal de acceso de ADIF, que comenzaron en 2023 y se espera concluyan en 2026, buscan mejorar la infraestructura ferroviaria, permitiendo una mayor eficiencia en los transportes y una reducción en los tiempos de espera para los trenes.

La inversión total en estos trabajos supera los 50 millones de euros (unos 54 millones de dólares), poniendo de manifiesto la importancia estratégica de la infraestructura ferroviaria en el desarrollo urbano de Valencia.

Este tipo de proyectos evidencia cómo la planificación urbana moderna busca equilibrar las necesidades de movilidad con criterios de sostenibilidad y seguridad, contribuyendo a reducir las emisiones contaminantes y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

La nueva vía ciclista en Malilla representa un paso más en esa dirección, promoviendo un modo de transporte saludable y respetuoso con el medio ambiente, en línea con las políticas europeas de movilidad urbana sostenible.