El Ayuntamiento de València ha inaugurado un tramo del nuevo carril bici en la avenida Archiduque Carlos, financiado en gran parte por fondos europeos, que mejorará la movilidad y seguridad en la ciudad.
València continúa fortaleciendo su infraestructura de movilidad sostenible con la apertura de un nuevo tramo del carril bici en la avenida Archiduque Carlos, una iniciativa que forma parte de un plan estratégico para promover el uso de la bicicleta y reducir la congestión en la ciudad.
El pasado 24 de septiembre de 2025, el responsable de Movilidad del Ayuntamiento, Jesús Carbonell, realizó una visita al tramo ya en funcionamiento, que comprende aproximadamente 300 metros desde la avenida del Cid hasta la calle del Músico Ayllón.
Este primer segmento conecta con otros carriles bici en las calles adyacentes, facilitando un recorrido más seguro y cómodo para los ciclistas. La obra completa, que contempla una ampliación de la red ciclista en varios barrios, estará finalizada para finales de noviembre del mismo año.
Este proyecto, que forma parte de los presupuestos participativos DecidimVLC 2020-2021, ha sido posible gracias a una subvención europea que cubre el 90% del coste total, aproximadamente 900.000 euros (al cambio, unos 970.000 euros). La inversión total, que asciende a casi un millón de euros, ha sido adjudicada a la empresa Guerola Áridos y Hormigones SL, encargada de ejecutar las obras bajo los estándares de accesibilidad y seguridad requeridos por la normativa vigente.
El nuevo carril bici es bidireccional, con una anchura de 2,50 metros, y se encuentra segregado de la calzada en la mayoría de sus tramos, garantizando mayor seguridad para los usuarios.
En puntos específicos, como las paradas de autobús y las medianas, el trazado comparte espacio con el tráfico vehicular en ciertas zonas, pero siempre respetando las normativas de movilidad y accesibilidad.
Supuestamente, estas acciones se enmarcan en una estrategia a largo plazo para transformar la ciudad en un entorno más sostenible y amigable con el medio ambiente, siguiendo las tendencias europeas que priorizan la movilidad activa y la reducción de emisiones de CO2.
La incorporación de avisadores acústicos y sistemas de descontadores en pasos peatonales contribuye a mejorar la accesibilidad para personas con discapacidad visual, en línea con las directrices internacionales.
Además de la infraestructura ciclista, se han instalado dos nuevos pasos de peatones semaforizados en puntos estratégicos de la avenida, y se ha ampliado un tercer paso en la intersección con las calles Enguera y Músico Ayllón.
Estas mejoras buscan potenciar la permeabilidad entre barrios como Patraix y Tres Forques, y facilitar los desplazamientos hacia centros educativos como el CEIP 8 de marzo, que recibe una gran afluencia de escolares y familias.
Supuestamente, en el pasado, València ha sido pionera en la implementación de políticas de movilidad sostenible, con una red de carriles bici que ha crecido considerablemente en los últimos años.
La ciudad, que en 2020 contaba con menos de 50 kilómetros de infraestructura ciclista, ahora aspira a superar los 120 kilómetros para 2025, consolidándose como un referente en movilidad activa en el sur de Europa.
Con estas acciones, el Ayuntamiento pretende no solo mejorar la seguridad y la comodidad de ciclistas y peatones, sino también impulsar un cambio de cultura en la movilidad urbana, promoviendo modos de transporte más saludables y respetuosos con el medio ambiente, en línea con las directrices de la Unión Europea y las políticas de sostenibilidad globales.