El zoológico de València invertirá más de 60 millones de euros en una innovadora ampliación que recreará la importancia cultural y económica de la Ruta de la Seda, conectando tradiciones chinas, africanas y valencianas a través de espacios inmersivos y actividades interactivas.

El Bioparc de València está a punto de embarcarse en un proyecto de expansión que marcará un hito en la historia del zoológico y de la ciudad. Con una inversión superior a los 60 millones de euros, aproximadamente 55 millones de euros al cambio, este plan estratégico busca transformar sus instalaciones en un recorrido cultural y educativo que rinda homenaje a la importante influencia de la Ruta de la Seda en el desarrollo global.

Este ambicioso proyecto, presentado por la alcaldesa María José Catalá, se divide en varias fases que permitirán al visitante explorar desde los inicios de esta histórica ruta comercial hasta su impacto en la cultura valenciana, especialmente en su tradición textil y en la biodiversidad de la región.

La primera fase, denominada 'El Camino Copto', invertirá unos 16 millones de euros y recreará los ecosistemas de las rutas marítimas y terrestres que conectaron África, Egipto y la Península Arábiga.

Entre las novedades, se incluyen recintos para especies emblemáticas africanas, nuevas aves y un tanque dedicado a peces y corales.

La segunda fase, que ya está en marcha, se centrará en la recuperación de las alquerías, esas tradicionales edificaciones andaluzas que en su día facilitaron el proceso de producción de seda en la región.

La rehabilitación de estas construcciones costará alrededor de 1,2 millones de euros y permitirá a los visitantes entender el ciclo de la seda, desde la cría de gusanos hasta la fabricación de hilos mágicos, además de ofrecer espacios interactivos donde se podrán ver telares y aprender sobre la historia de la artesanía textil valenciana.

Finalmente, la tercera fase se centrará en la antigua China Imperial. Con una inversión estimada en 29 millones de euros, se construirá un hermoso jardín tradicional chino, donde los visitantes podrán disfrutar de actividades culturales y recreativas.

Entre ellas, destacan ceremonias del té, talleres de sombras chinescas, y paseos virtuales en dragón por los parques nacionales más impresionantes de China, utilizando tecnología de realidad virtual.

Este espacio también incluirá exhibiciones dedicadas al 'tornaviaje', que conecta la Ruta de la Seda con las rutas del Pacífico y Filipinas, resaltando la importancia de València en las redes comerciales globales.

La alcaldesa resaltó la relevancia de este proyecto: “Bioparc no solo es un espacio para la conservación animal y la educación, sino también un símbolo de la historia y cultura valenciana.

Con esta ampliación, reforzamos su papel como un referente cultural y turístico de calidad, que conecta nuestras raíces con el mundo”.

El director de la Fundación Bioparc, Fernando González Sitges, explicó que una vez finalizadas las tres fases, se espera un aumento en el número de visitantes, pudiendo llegar a medio millón más anualmente.

Actualmente, el parque recibe alrededor de 650.000 visitantes, de los cuales más del 60% son turistas internacionales. La expansión no solo potenciará el turismo, sino también el compromiso del parque con la conservación, participando en unos 50 programas internacionales para proteger especies en peligro de extinción, como gorilas, chimpancés y elefantes africanos.

El concepto de 'Zoo inmersión' se mantendrá en la ampliación, eliminando barreras visuales entre animales y público para crear una experiencia más auténtica y educativa.

Además, se incorporarán nuevos espacios para la observación y áreas de restauración temáticas, como una zona inspirada en Zanzíbar, para ofrecer una experiencia cultural completa.

Este proyecto refleja la visión de València como una ciudad que apuesta por el turismo sostenible, la ciencia, la educación y la conservación. La implicación de empresas como Rain Forest, que colaboran en su desarrollo, demuestra el compromiso del sector privado con el progreso cultural y medioambiental de la región.

En resumen, la ampliación del Bioparc de València no solo elevará su nivel como espacio de conservación y educación, sino que también ofrecerá a los visitantes un recorrido único por la historia de la Ruta de la Seda, enriqueciendo su experiencia cultural y promoviendo el conocimiento sobre el patrimonio valenciano y sus conexiones internacionales.

Sin duda, este proyecto posicionará a València como uno de los destinos más innovadores y educativos en Europa en los próximos años.