La gobernadora Kathy Hochul denuncia los efectos negativos de los aranceles y la deteriorada relación con Canadá, destacando la importancia de la cooperación regional y el costo energético para las familias de Nueva York.
En una reunión reciente en Boston, Massachusetts, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, participó en una mesa redonda sobre desarrollo económico junto a gobernadores del noreste de Estados Unidos y primeros ministros canadienses.
El evento, que fue transmitido en YouTube y en diversas plataformas, abordó los desafíos económicos y las relaciones internacionales que afectan a la región.
Hochul comenzó agradeciendo a la gobernadora de Massachusetts, Maura Healey, por la invitación y por la organización del encuentro en el majestuoso Capitolio de Massachusetts.
La gobernadora resaltó la importancia de mantener y fortalecer los lazos con Canadá, uno de los socios comerciales más importantes para los estados del noreste, especialmente en materia de energía.
Históricamente, la relación entre Estados Unidos y Canadá ha sido una de las más sólidas en el mundo, basada en la cooperación y la confianza mutua.
Canadá suministra aproximadamente el 20% de la electricidad consumida en Nueva York, principalmente a través de hidroeléctricas en Quebec. Este acuerdo ha permitido a la región reducir sus costos energéticos y atraer inversiones internacionales en sectores tecnológicos y de manufactura avanzada.
Sin embargo, Hochul expresó su preocupación por la reciente escalada de tensiones comerciales, especialmente los aranceles impuestos por Estados Unidos, que calificó como una forma de impuesto que afecta a todos los consumidores y empresas.
La gobernadora advirtió que estas políticas pueden provocar la pérdida de miles de empleos y aumentar los costos en artículos básicos para las familias, incluyendo la energía.
En su discurso, Hochul destacó que, en los próximos años, Nueva York planea aprovechar aún más los recursos hidroeléctricos de Quebec, con la intención de abastecer a más de un millón de hogares en el estado.
Esto, añadió, forma parte de una estrategia para garantizar la competitividad de la región frente a la creciente demanda de energía por parte de industrias como la fabricación de semiconductores y las empresas de inteligencia artificial.
La gobernadora también subrayó la necesidad de fortalecer las relaciones bilaterales con Canadá, evitando discursos y políticas que puedan entorpecer la colaboración.
Recordó que en su primer día en el cargo anunció un proyecto para ampliar el uso de energía limpia y confiable proveniente de Canadá, buscando reducir la dependencia de fuentes energéticas costosas y contaminantes.
En el contexto histórico, esta relación energética ha sido un pilar para la economía regional desde hace décadas, contribuyendo al crecimiento de ciudades como Albany, Buffalo y Rochester, que se han beneficiado de la electricidad hidroeléctrica en términos de costos y sostenibilidad.
Hochul concluyó haciendo un llamado a actuar de manera independiente y soberana en asuntos energéticos, ante la falta de apoyo y políticas claras a nivel federal.
Afirmó que, a pesar de los desafíos en Washington, el estado de Nueva York continuará fortaleciendo sus vínculos con Canadá y buscando soluciones que beneficien a sus residentes, asegurando un futuro energético estable y competitivo para todos.