Nueva Delhi, 20 de marzo: Siemens ha decidido llevar a cabo una reestructuración que afectará a aproximadamente 5,600 empleados de su división de Industrias Digitales, lo que representa alrededor del 8% de su plantilla total.

Esta decisión responde a los desafíos del mercado, especialmente en regiones críticas como Alemania y China, donde la demanda ha mostrado signos de debilidad.

De acuerdo con un informe de Reuters, estos despidos se enmarcan en un contexto donde Siemens busca ajustar su capacidad de producción ante un panorama económico incierto.

La cifra de 5,600 empleos es la más alta que la compañía ha anunciado desde 2017, cuando se eliminaron 2,600 puestos en Alemania. En total, la división de Industrias Digitales cuenta con aproximadamente 68,000 empleados a nivel global, lo que hace que esta medida sea significativa.

Además de los despidos en la división principal, se ha reportado que Siemens también planea reducir su personal en cerca de 450 empleados en su división de carga de vehículos eléctricos.

Esta reducción de personal es un intento de la compañía por mejorar su eficiencia operativa, algo que se vuelve crucial en un entorno competitivo creciente.

La división de Industrias Digitales de Siemens ha sido históricamente la más rentable de la compañía, conocida por sus controladores y software de fábrica, que han permitido a la empresa mantenerse a la vanguardia en el sector de la automatización industrial.

Sin embargo, la competencia ha aumentado y la demanda ha disminuido en los últimos dos años, lo que ha llevado a una caída en los pedidos y en los ingresos.

Cedrik Neike, miembro del consejo de administración de Siemens, defendió los despidos al señalar que la división de automatización necesita ser más rápida y ágil.

Neike subrayó la necesidad de adoptar un enfoque más equilibrado a nivel regional y ampliar la base de clientes. Sin embargo, este enfoque ha sido cuestionado por algunos líderes sindicales.

Juergen Kerner, vicepresidente de IG Metall y miembro del consejo de supervisión de Siemens, expresó su desacuerdo con la estrategia de reducción de personal.

Kerner argumentó que la transformación de la empresa no debería lograrse a través de despidos, sino mediante el desarrollo y la capacitación de los empleados.

En el contexto más amplio, la decisión de Siemens se une a una serie de despidos en otras grandes corporaciones, como Amazon, que también está recortando miles de empleos en un esfuerzo por ahorrar costos y ajustar su estructura organizativa.

La situación actual refleja un periodo de incertidumbre en diversas industrias, donde la adaptación a las nuevas realidades del mercado se vuelve esencial para la supervivencia y el crecimiento a largo plazo.