Investigadores identifican Satyrium curiosolus, una mariposa endémica en Alberta, Canadá, con una fascinante relación con las hormigas y un inusual aislamiento genético.
Recientemente, se ha descubierto una nueva especie de mariposa en el Parque Nacional Waterton Lakes, ubicada en Alberta, Canadá. Esta pequeña mariposa, de color grisáceo y marrón, conocida como Satyrium curiosolus o la mariposa peinada curiosamente aislada, ha sido reconocida como una especie única, separada de otros grupos de mariposas similares que se creían que habitaban en la misma región.
Los expertos del Wilder Institute y el zoológico de Calgary han identificado a esta mariposa que se encuentra limitadamente en una área de aproximadamente 300 hectáreas en el fan coluvial de Blakiston, el cual representa la mayor superficie de sedimentos aluviales del parque.
Esta región ha sido moldeada por el flujo de arroyos de montaña que arrastran sedimentos de la montaña. Lo intrigante es que esta población de mariposas está a más de 450 kilómetros de distancia de las poblaciones más cercanas de British Columbia y Montana.
Zachary MacDonald, uno de los co-autores del estudio, expresó su entusiasmo por el hallazgo, subrayando que este descubrimiento es solo 'la punta del iceberg'.
El foco ahora es desarrollar estrategias efectivas para la conservación de esta especie altamente amenazada.
La mariposa peinada curiosamente aislada no solo es única en su apariencia, con una envergadura que oscila entre 2.5 y 4 centímetros, sino que también tiene características genéticas que la distinguen de sus parientes más cercanos. Un estudio genómico llevado a cabo por los investigadores ha demostrado que esta población ha estado aislada de otras mariposas similares durante casi 40,000 años, lo que sugiere una evolución particular y un conjunto genético muy limitado.
James Glasier, ecólogo de poblaciones de conservación y otro co-autor del estudio, comentó que al comenzar su investigación, no esperaban encontrar una nueva especie, pero a medida que examinaron a fondo la población de mariposas, descubrieron que tenía características inusuales y un estado de endemismo que hacía que fuera única para Alberta y Canadá.
Un aspecto fascinante de esta mariposa es su relación simbiótica con ciertas especies de hormigas, específicamente Lasius ponderosae. Las larvas de la mariposa excretan una sustancia azucarada llamada mielada, la cual es consumida por las hormigas, a cambio de protección contra depredadores y parásitos.
Este tipo de interacción no es inusual en el mundo de los insectos, pero el grado de dependencia y la localización geográfica de esta relación son singulares en este caso.
Con un número estimado de solo 500 individuos efectivos dentro de la población, los científicos están preocupados por la baja diversidad genética de esta especie, un factor crítico para su capacidad de adaptarse a los cambios ambientales, sobre todo en el contexto del calentamiento global y los incendios forestales.
Para abordar este desafío, el Wilder Institute, en colaboración con Parques Canadá, ya ha comenzado a monitorear las condiciones de vida de estas mariposas.
A largo plazo, también están considerando la posibilidad de criar mariposas en cautiverio y reintroducirlas en su hábitat natural o incluso explorar la creación de poblaciones secundarias dentro del parque.
Esto es esencial para evitar un colapso poblacional y garantizar su supervivencia futura.
Este hallazgo resalta la importancia de la investigación genética en la clasificación y conservación de especies, revelando que a menudo hay mucho más en juego genéticamente de lo que puede ser evidente a simple vista.
La historia de la mariposa peinada curiosamente aislada subraya no solo un hecho biológico, sino una llamada a la acción en términos de conservación y protección de los ecosistemas vulnerables.