Supuestamente, India ha implementado una innovadora red 4G diseñada y desarrollada completamente en el país, conectando más de 26,700 aldeas y llevando internet de alta velocidad a zonas rurales por primera vez. La iniciativa, que supone un paso importante en la autosuficiencia tecnológica de la nación, ha sido posible gracias a la colaboración entre empresas locales como Tata Consultancy Services, C-DOT y Tejas Networks. La red, llamada Bharat Telecom Stack o 'Swadesh 4G Network', posiciona a India como uno de los pocos países en el mundo con tecnología de telecomunicaciones propia y compatible con futuras generaciones de conectividad.

El pasado 27 de septiembre, supuestamente, India dio un paso histórico en su camino hacia la autosuficiencia tecnológica con el lanzamiento oficial de su red 4G autóctona, conocida como Bharat Telecom Stack o 'Swadesh 4G Network'.

Este avance, que conecta más de 26,700 pueblos y aldeas en todo el país, representa un cambio significativo en la estrategia de India para reducir su dependencia de infraestructuras de telecomunicaciones extranjeras y promover el desarrollo de una tecnología propia y segura.

La iniciativa, que tiene como objetivo democratizar el acceso a Internet de alta velocidad en las zonas rurales, es vista como una de las acciones más importantes en la historia reciente de la digitalización india.

Supuestamente, esta red ha sido diseñada y desarrollada enteramente en India en colaboración con varias empresas nacionales, incluyendo Tata Consultancy Services (TCS), el Centro de Desarrollo de Telemática (C-DOT) y Tejas Networks Limited.

La colaboración entre estas entidades ha permitido la creación de una infraestructura moderna, flexible y escalable, compatible con las futuras tecnologías 5G.

La red, que es compatible con los estándares 4G y está preparada para la transición a 5G, ha sido denominada como un ejemplo de 'tecnología indigenizada' que busca promover la independencia tecnológica del país.

Este proyecto se enmarca dentro de la visión del Primer Ministro Narendra Modi de transformar a la India en una nación digital y autosuficiente. La implementación de esta red ha supuesto la creación de más de 100,000 sitios de infraestructura, incluyendo estaciones base y estaciones radio, además de la instalación de centros de datos y la integración de plataformas de gestión en tiempo real mediante la plataforma de Operaciones Cognitivas de TCS.

Se estima que aproximadamente 22 millones de ciudadanos, principalmente en áreas rurales, ahora podrán acceder a servicios de datos 4G a precios asequibles.

Esto facilitará la incorporación de herramientas digitales en la educación, la agricultura y la telemedicina, aspectos que, supuestamente, mejorarán significativamente la calidad de vida de estas comunidades.

Desde un punto de vista histórico, India ha tenido un papel destacado en el sector de las telecomunicaciones en Asia y en el mundo. En los años 80 y 90, el país empezó a desarrollar su propio sistema de comunicaciones, y en los últimos años ha acelerado sus esfuerzos para crear una infraestructura tecnológica propia, en respuesta a las tensiones comerciales y a la necesidad de reducir la dependencia de tecnologías extranjeras.

La creación de esta red 4G autóctona es vista como un paso decisivo en esa dirección.

Supuestamente, la iniciativa también busca fomentar la innovación y la competitividad en el sector tecnológico nacional, generando empleo y promoviendo el desarrollo de nuevas empresas en el ámbito de las telecomunicaciones e infraestructura digital.

La apuesta por una tecnología propia no solo fortalece la soberanía del país, sino que también impulsa su presencia en el escenario global como uno de los principales actores en innovación tecnológica.

En cifras, la inversión en la creación de esta red se estima en unos 3.000 millones de rupias indias, equivalentes a aproximadamente 36 millones de euros. La implementación ha sido calificada como un éxito, y se espera que en los próximos años la cobertura y la calidad del servicio mejoren aún más, consolidando a India como un referente en innovación tecnológica y conectividad en regiones remotas y rurales.

La llegada de esta infraestructura también ha sido celebrada por organizaciones internacionales que ven en ella un ejemplo de cómo los países en desarrollo pueden alcanzar la autosuficiencia tecnológica y cerrar la brecha digital global.