La Comunidad de Madrid aprueba una inversión de 4.904.103 euros para la gestión de residuos de construcción y demolición en 2026, con un aumento del 30% respecto al contrato anterior y medidas para potenciar la valorización y el control ambiental en tres instalaciones regionales.

La Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid confirmó este martes la aprobación de una inversión de 4.904.103 euros para la gestión de residuos de construcción y demolición durante 2026, con un plazo de ejecución de 11 meses.

La cuantía implica un incremento del 30% respecto al encargo anterior, que se situó en 3.762.467 euros.

Con esta actuación, el Ejecutivo regional garantiza la actividad de los complejos y centros públicos de clasificación y tratamiento de este tipo de desechos, situados en Navalcarnero, El Molar y Arganda del Rey.

Estas infraestructuras, clave para prevenir vertidos incontrolados, buscan reducir los riesgos para la salud pública y el entorno natural al gestionar de forma controlada los residuos de construcción.

Entre las labores previstas figuran la recepción de los residuos y su gestión, la clasificación y separación de materiales para su posterior trituración y cribado.

El encargo también contempla el mantenimiento de equipos e instalaciones, la vigilancia ambiental y de seguridad, y todas las acciones necesarias para cumplir las autorizaciones ambientales vigentes.

Entre las actuaciones destacan la optimización de los procesos de valorización, con el objetivo de recuperar más del 70% de los residuos tratados; el mantenimiento del marcado CE de los áridos reciclados; el refuerzo de los controles ambientales; y la incorporación, como novedad, de mediciones topográficas para un seguimiento más preciso de los volúmenes gestionados.

supuestamente estas medidas podrían mejorar la trazabilidad y reducir los vertidos no controlados en la región.

supuestamente, a lo largo de los años, la región ha reforzado sus compromisos para alinear la gestión de residuos de construcción y demolición con las metas europeas de economía circular.

Como contexto histórico, la gestión de residuos de construcción y demolición en la Comunidad de Madrid ha experimentado un impulso creciente en la última década, a medida que la legislación europea ha exigido mayores porcentajes de valorización y una mayor transparencia de los procesos.