La región invierte en la conservación de especies amenazadas mediante intervenciones en nidos, rescates y seguimiento con tecnología avanzada, reforzando su compromiso con la biodiversidad.

Durante lo que va de 2025, la Comunidad de Madrid ha llevado a cabo un total de 142 intervenciones en nidos de la región con el objetivo de proteger a las especies de aves en peligro.

Estas acciones forman parte de un esfuerzo conjunto del Gobierno regional y el Grupo de Intervención en Altura del Cuerpo de Agentes Forestales (GIAM), que trabaja en espacios naturales protegidos, como la Dehesa de Navalquejigo en Fresnedillas de la Oliva, considerada Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) dentro de la Red Natura 2000.

El consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, supervisó recientemente estos trabajos, destacando la importancia de la labor del equipo especializado que forma parte del GIAM, compuesto actualmente por 14 miembros.

Estos agentes llevan a cabo tareas en lugares de difícil acceso, como árboles altos y paredes rocosas, principalmente en áreas protegidas, con un enfoque en la protección de especies en riesgo.

Entre las acciones más relevantes de este año, se incluyen cuatro rescates de urgencia en coordinación con la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 (ASEM112).

Además, se han instalado 102 dispositivos de seguimiento con anillas y emisores GPS en crías de aves, con la finalidad de monitorizar su desarrollo y comportamiento, contribuyendo así a la conservación de especies como el buitre negro, la cigüeña negra y el milano.

El papel de este equipo en la protección de la biodiversidad es fundamental, ya que permite detectar amenazas y actuar rápidamente para evitar la pérdida de ejemplares en peligro.

La labor de los agentes también incluye el cuidado de plataformas de cría, para evitar que sean ocupadas por especies invasoras, y el anillamiento de aves en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, donde se alberga la mayor colonia de buitre negro de la comunidad y una de las más grandes de Europa y del mundo.

Asimismo, el GIAM colabora con el control de fauna en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, ayudando a prevenir incidentes en el espacio aéreo.

En lo que va de año, han retirado aproximadamente 20 pollos de especies como el milano y el busardo ratonero, que han sido trasladados al Centro de Recuperación de Animales Silvestres Félix Rodríguez de la Fuente para su posterior liberación en áreas alejadas de zonas urbanas.

El compromiso de la región con la conservación no se limita a Madrid, ya que también participan en proyectos internacionales y nacionales. En los últimos tres años, han fortalecido su cooperación con Portugal, específicamente en el Parque Natural del Duero Internacional, en colaboración con la asociación Palombar, destinada a la conservación de la naturaleza y el patrimonio rural.

Entre las acciones realizadas, se encuentran la reparación y construcción de nidos tras el incendio forestal ocurrido en agosto pasado, que afectó unas 13.000 hectáreas.

Además, el equipo ha trabajado con diferentes comunidades autónomas, como Castilla-La Mancha, donde en febrero se instalaron tres plataformas para la cría de buitre negro en El Cardoso de la Sierra, en Guadalajara.

Estas iniciativas reflejan el compromiso de la comunidad madrileña por preservar su biodiversidad, invertir en protección de especies y promover una gestión sostenible de sus espacios naturales para las generaciones futuras.