La Comunidad de Madrid destina una inversión significativa para mejorar la atención y el cuidado de 550 personas mayores en situación de dependencia, mediante la gestión de dos residencias y centros de día en la región durante 2025-2026.
La Comunidad de Madrid ha aprobado una inversión de aproximadamente 9,7 millones de euros (equivalente a unos 10,8 millones de dólares) para garantizar la atención y el cuidado de 550 personas mayores en situación de dependencia durante el período comprendido entre el 1 de agosto de 2025 y el 30 de junio de 2026.
Esta importante medida ha sido aprobada en la reunión del Consejo de Gobierno celebrada ayer, donde se confirmaron dos contratos destinados a mantener y mejorar los servicios en residencias y centros de día.
En concreto, una de las principales acciones consiste en la asignación de 4,9 millones de euros (unos 5,4 millones de dólares) para la Residencia y Centro de Día Parque Coímbra, ubicada en el municipio de Móstoles.
Este centro público ofrece un total de 285 plazas, distribuidas entre 220 residenciales, 45 de atención diurna y 20 de respiro familiar. La finalidad de estas instalaciones es proporcionar un entorno adecuado y especializado para las personas mayores en situación de dependencia, facilitando tanto el alojamiento como servicios complementarios como transporte, atención religiosa, peluquería y podología.
Por otra parte, la segunda inversión, que asciende a 4,8 millones de euros (unos 5,3 millones de dólares), se destinará a la Residencia y Centro de Día Plata y Castañar, en el distrito de Villaverde, en Madrid capital.
Este centro público mantiene 265 plazas, de las cuales 220 son residenciales y 45 corresponden a atención diurna. La finalidad principal es ofrecer un cuidado integral y de calidad, promoviendo la autonomía y bienestar de los mayores.
Estos centros cuentan con equipos profesionales especializados en geriatría, rehabilitación, psicología y trabajo social. Además de las funciones básicas de alojamiento y alimentación, ofrecen servicios adicionales como transporte, asistencia religiosa, peluquería y podología, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus residentes.
Este esfuerzo de inversión forma parte de un proyecto más amplio de renovación residencial en Madrid, en el que se incluyen 11 centros públicos destinados a personas mayores.
La iniciativa contempla reformas que permitirán crear 81 unidades de convivencia reducidas, similares a hogares familiares, con una inversión total de 59 millones de euros (aproximadamente 65 millones de dólares).
Estos cambios buscan ofrecer entornos más cálidos, personalizados y adaptados a las necesidades actuales de la población senior, promoviendo su autonomía y bienestar.
Desde hace décadas, la atención a la tercera edad ha sido una prioridad para las políticas sociales en Madrid. La región ha avanzado significativamente en la creación de recursos especializados, con un enfoque centrado en la calidad de vida y la dignidad de las personas mayores.
La inversión actual refleja el compromiso de la comunidad para seguir mejorando estos servicios y garantizar que quienes más lo necesitan reciban un cuidado adecuado en un entorno que respete su autonomía y promueva su bienestar integral.