La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha su nuevo Plan de Calidad e Inspección 2025-2026, una iniciativa que abarca todos los centros y servicios de atención social de la región, ya sean públicos, concertados o privados.

Esta medida fue anunciada el 13 de enero de 2025 y se ha oficializado a través de su publicación en el Boletín Oficial regional (BOCM). El plan se plantea como un programa de supervisión bianual que contempla la realización de más de 12.000 actividades de inspección, lo que representa un aumento del 28% respecto a 2021.

La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, comentó sobre las novedades del plan durante una visita a la Residencia Santa María del Monte Carmelo, en la capital española.

En sus declaraciones, Dávila enfatizó que la inspección se centrará en 14 líneas de actuación específicas, destacándose la vigilancia de los derechos de los usuarios.

Además, el programa busca homogeneizar los criterios utilizados al evaluar el grado de satisfacción de los beneficiarios.

Uno de los aspectos destacados del Plan de Calidad e Inspección es la mejora y promoción del servicio de restauración en las residencias para personas mayores, un tema de gran relevancia en el sector.

Para fortalecer esta área, el gobierno regional ha lanzado un nuevo contrato en 2024, destinado a incrementar la seguridad alimentaria y la calidad nutricional en aproximadamente 500 residencias de mayores, incluidas las de gestión privada.

Este contrato permitirá llevar a cabo 1.000 auditorías específicas para garantizar que estas instalaciones cumplen con los estándares requeridos.

Las auditorías incluirán no solo análisis higiénico-sanitarios de las instalaciones y de los procedimientos de preparación de los alimentos, sino que también examinarán la calidad nutricional de los menús y la adecuación de la dieta semanal a las necesidades de los residentes.

Se realizarán encuestas de satisfacción que garantizarán el anonimato de los encuestados, asegurando que los usuarios puedan dar su opinión sin temor a repercusiones.

Por si fuera poco, Ana Dávila también comunicó que la Comunidad de Madrid ha aprobado la creación de un nuevo Cuerpo de Inspectores de Servicios Sociales de nivel superior.

Este será el primer equipo de su tipo en una comunidad autónoma española y estará compuesto por cerca de 50 técnicos adscritos a la Dirección General de Evaluación, Calidad e Innovación.

Esta iniciativa no solo fortalecerá la supervisión de los servicios sociales en la región, sino que también elevará el nivel de formación y titulación exigido a estos inspectores, promoviendo así una mejora continua en la calidad de la atención social.

Esta medida se enmarca en un contexto más amplio de esfuerzos por parte de las administraciones para garantizar la calidad en los servicios públicos en España.

Históricamente, la atención social en el país ha enfrentado desafíos significativos, lo que hace que iniciativas como esta sean cruciales para mejorar la vida de los ciudadanos más vulnerables.