La Comunidad de Madrid destina 1,5 millones de euros para contratar a 50 intérpretes de lengua de signos en apoyo a alumnos con discapacidad auditiva durante el curso 2025/26, garantizando una educación inclusiva.

La Comunidad de Madrid ha anunciado una importante inversión de aproximadamente 1,5 millones de euros (equivalentes a unos 1,6 millones de dólares o 1,4 millones de libras esterlinas) para la contratación de 50 intérpretes especializados en lengua de signos española.

Esta medida busca fortalecer el apoyo a los alumnos con discapacidad auditiva en los centros educativos públicos durante el próximo curso escolar 2025/26.

Este esfuerzo forma parte de una estrategia más amplia para promover la inclusión educativa y garantizar que todos los estudiantes tengan acceso a una enseñanza de calidad, independientemente de sus necesidades específicas.

La decisión fue tomada tras la aprobación del Consejo de Gobierno, que prorrogó el contrato vigente para continuar brindando este servicio vital a los estudiantes con discapacidad auditiva en secundaria, Formación Profesional, régimen especial y enseñanzas artísticas.

El período de aplicación de esta iniciativa será desde el 1 de septiembre de 2025 hasta el 31 de agosto de 2026. Durante el curso académico 2024/25, cerca de 150 alumnos de 26 centros educativos se beneficiaron de este apoyo, que permite a los estudiantes comprender las explicaciones de sus docentes, participar activamente en las clases y relacionarse con sus compañeros en igualdad de condiciones.

El servicio de interpretación no solo cubre las actividades académicas, sino también actividades complementarias, pruebas y cualquier situación en la que sea necesario el apoyo en lengua de signos.

Además, los intérpretes trabajan en colaboración con el profesorado para elaborar planes de actuación personalizados y realizar informes sobre las acciones llevadas a cabo, garantizando así una atención continua y adaptada a las necesidades de cada alumno.

Desde una perspectiva histórica, la inclusión de intérpretes de lengua de signos en los centros educativos ha sido un proceso que ha ido ganando terreno en España desde hace varias décadas.

La Ley de Educación para Personas con Discapacidad, aprobada en 2003, estableció la obligación de ofrecer apoyos específicos a los estudiantes con discapacidades, incluyendo la interpretación en lengua de signos.

Desde entonces, diferentes comunidades autónomas han ido ampliando estos recursos, y Madrid no ha sido la excepción.

Con esta inversión, la Comunidad busca no solo cumplir con las normativas de inclusión, sino también eliminar barreras comunicativas que puedan afectar el desarrollo académico y social de estos alumnos.

La contratación de estos profesionales especializados en lengua de signos refleja un compromiso claro con la igualdad de oportunidades y la diversidad en el sistema educativo madrileño.

Este tipo de iniciativas contribuyen a crear un entorno escolar más inclusivo, donde la diversidad se valorada y respetada, y donde todos los estudiantes tienen la posibilidad de alcanzar su máximo potencial.

La inversión en recursos humanos y materiales para la atención a la discapacidad auditiva demuestra una voluntad de avanzar hacia una educación realmente inclusiva y accesible para todos.