La región lanza la convocatoria para las becas de comedor y Bachillerato del próximo curso 2025/26, con una inversión récord que supera los 150 millones de euros y nuevas ventajas para las familias.

La Comunidad de Madrid ha anunciado la apertura de los plazos para solicitar las becas escolares correspondientes al curso académico 2025/26, destinando una inversión total que supera los 150 millones de euros, específicamente 150 millones de euros (equivalentes a aproximadamente 111,5 millones de euros en la cifra original).

Esta inversión representa un aumento significativo en comparación con años anteriores, reflejando el compromiso de la región con la igualdad de oportunidades educativas y el apoyo a las familias.

Las becas de comedor escolar podrán solicitarse desde el miércoles 18 de junio hasta el 15 de julio, facilitando a los padres y tutores la gestión a través del portal institucional de la Comunidad de Madrid, la Cuenta Digital, los registros oficiales y los centros educativos públicos y concertados de la región.

Para agilizar el proceso, los solicitantes deberán presentar una solicitud que incluya sus datos básicos, otorgando además un permiso explícito para que la Administración regional pueda verificar la información necesaria, junto con los documentos justificativos en caso de ser requeridos.

Es imprescindible que la solicitud esté firmada por todas las personas mayores de edad que figuren en ella.

Por otro lado, las becas para estudios de Bachillerato podrán tramitarse desde el martes 17 de junio hasta el 7 de julio, también a través de la web oficial y la plataforma digital de la Comunidad.

La inversión destinada a estas ayudas asciende a 43,5 millones de euros, beneficiando a más de 15.000 alumnos que estudian en centros concertados y privados.

El objetivo principal de estas becas es fortalecer la libertad de elección de las familias y promover la igualdad de oportunidades, uno de los pilares fundamentales del sistema educativo madrileño.

Además, los estudios de Bachillerato en los centros públicos de la región son totalmente gratuitos para los estudiantes, lo que hace aún más relevante la ayuda para quienes optan por centros privados o concertados.

Una de las novedades más destacadas en esta convocatoria es la inclusión de la nota académica del alumno como criterio para la concesión de las becas.

Los estudiantes podrán obtener hasta dos puntos adicionales en función de su calificación en el último curso, incentivando así el rendimiento académico.

También se ha establecido la posibilidad de prorrogar la beca para cursos posteriores, siempre que se mantengan los requisitos y el beneficiario solicite la continuidad.

Las ayudas de comedor están dirigidas a familias con rentas per cápita que no superen los 8.400 euros anuales, y en esta convocatoria se amplía la cobertura para hijos de miembros de las Fuerzas Armadas destinados en la región, quienes podrán acceder a las mismas condiciones que los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que ya venían recibiendo estas ayudas.

Asimismo, las familias numerosas con rentas per cápita entre 8.400 y 10.000 euros podrán obtener una ayuda equivalente al 30% del coste del servicio de comedor, una medida que busca aliviar la carga económica en estos hogares con múltiples hijos.

Las familias con ingresos inferiores a los límites mencionados ya tenían acceso a las ayudas en convocatorias anteriores.

La comunidad madrileña ha demostrado en varias ocasiones su compromiso con la educación inclusiva y de calidad, destinando recursos importantes para reducir las desigualdades sociales.

Desde la década de 1980, cuando se implementaron las primeras becas escolares en la región, el volumen de inversión ha ido en aumento, reflejando la importancia de apoyar a las familias en el acceso y continuidad de los estudios.

Estas ayudas no solo benefician a los estudiantes, sino que también representan una inversión en el futuro económico y social de la comunidad. La educación es vista como un motor de desarrollo y cohesión social, por lo que las políticas públicas en este ámbito buscan garantizar que todos los niños y jóvenes puedan acceder a una educación de calidad sin que las dificultades económicas sean un impedimento.

En definitiva, con esta convocatoria, la Comunidad de Madrid reafirma su compromiso con una educación inclusiva y de calidad, ampliando el alcance de sus ayudas y adaptándose a las necesidades actuales de las familias madrileñas, en un contexto donde la inversión y el apoyo institucional son clave para afrontar los desafíos del sistema educativo.