La Comunidad de Madrid ha aprobado una importante rebaja en el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, beneficiando a miles de habitantes y convirtiéndose en la región con los impuestos más bajos del país, con un ahorro anual de aproximadamente 130 millones de euros.
En una decisión que refuerza la posición de Madrid como la región con el sistema fiscal más competitivo de España, el Consejo de Gobierno de la Comunidad ha aprobado una nueva bajada en los impuestos sobre Sucesiones y Donaciones.
La medida, que refleja la intención de consolidar la región como referente en política fiscal, supondrá ahorros aproximados de 130 millones de euros anuales para unos 14.000 ciudadanos en la comunidad.
Este cambio en la legislación fiscal regional amplía notablemente los beneficios, permitiendo que un mayor número de contribuyentes puedan acceder a bonificaciones y reducciones en sus cargas fiscales.
La medida se enmarca en la estrategia de la Comunidad de Madrid para promover la economía, la inversión y la igualdad fiscal entre sus habitantes.
Entre las novedades más relevantes se encuentra la ampliación de las bonificaciones en las operaciones de transmisión de bienes entre familiares. Así, la bonificación en el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones para las transacciones entre hermanos, tíos y sobrinos, así como en todo el grupo de parentesco III (que incluye tíos, sobrinos, primos y otros familiares de segundo y tercer grado), pasará del 25% al 50%, permitiendo mayores alivios fiscales en estas operaciones.
Asimismo, la comunidad incrementa la bonificación al 100% en donaciones esporádicas inferiores a 1.000 euros entre particulares, eliminando la obligación de presentar autoliquidaciones por esas cantidades. También se eliminará la exigencia de formalizar los documentos notariales para donaciones de hasta 10.000 euros, facilitando y simplificando los procesos de transmisión patrimonial.
Con la entrada en vigor prevista para los próximos meses, esta nueva medida se une a un total de 32 rebajas fiscales aprobadas en la región desde 2019, bajo la primera etapa del gobierno de Isabel Díaz Ayuso.
Estas reducciones contrastan con la política fiscal del Gobierno central, que desde 2018 ha incrementado en aproximadamente 93 ocasiones los impuestos a nivel nacional.
Madrid destaca además por su modelo fiscal único en España, pues es la única comunidad autónoma que no dispone de tributos propios. Desde 2020, encabeza el Índice Autonómico de Competitividad Fiscal elaborado por la Fundación para el Avance de la Libertad y la Tax Foundation de EE.UU., consolidando su liderazgo en materia de política fiscal empresarial y familiar.
Además, la política de rebajas fiscales madrileña también ha tenido un impacto positivo en las finanzas públicas. En 2022, la región recaudó aproximadamente 880 millones de euros más que el año anterior en conceptos autonómicos del IRPF, alcanzando una recaudación total de unos 13.200 millones de euros, según datos del Ministerio de Hacienda. Este aumento en la recaudación demuestra que una política fiscal favorable puede no solo atraer inversión y aumentar la actividad económica, sino también fortalecer los ingresos autonómicos y financiar servicios públicos esenciales.
En resumen, las recientes medidas fiscales en Madrid refuerzan su liderazgo en competitividad y bienestar económico, beneficiando a un amplio colectivo de ciudadanos y consolidando su posición de referencia en el escenario fiscal nacional e internacional.
La comunidad sigue demostrando que una política de impuestos bajos puede ser compatible con una gestión eficiente y con el crecimiento sostenible de su economía.