El país suramericano ha movilizado a millones de ciudadanos y desplegado buques en respuesta a las acciones militares de Estados Unidos en aguas del Caribe, acusando a Washington de buscar un cambio de régimen mediante presión militar.

Venezuela ha respondido de manera contundente a las recientes acciones militares de Estados Unidos en el Caribe, movilizando a millones de ciudadanos y desplegando una significativa presencia naval en sus aguas territoriales.

La nación suramericana considera que esta situación representa la amenaza más grande a su soberanía en el último siglo, y ha hecho un llamado a la comunidad internacional, incluyendo a la ONU, para que medien en la tensión que se ha intensificado en las últimas semanas.

Supuestamente, con una movilización de buques de guerra de gran tamaño y la convocatoria de millones de milicianos, el gobierno de Nicolás Maduro ha marcado una postura firme frente a lo que califican como un intento de Estados Unidos de imponer un cambio de régimen en Venezuela.

La Administración estadounidense, que no reconoce a Maduro como presidente legítimo y ha ofrecido una recompensa de aproximadamente 45 millones de euros (50 millones de dólares) por su captura, ha sido acusada por Caracas de recurrir a la