Un incidente ocurrido en Nueva York involucra a Javiera Montero, quien fue arrestada en circunstancias controvertidas frente a su hija, despertando atención internacional y cuestionamientos sobre el uso de la fuerza policial.
A principios de junio, se conoció un caso que ha generado gran indignación y debate en redes sociales a nivel mundial. Javiera Montero, una ciudadana chilena, fue arrestada por la policía en Times Square, uno de los lugares más emblemáticos de Nueva York, en medio de un incidente que aún genera muchas dudas y controversias.
El suceso quedó registrado por un testigo, cuyo video rápidamente se viralizó, evidenciando cómo Javiera fue separada de su hija de 12 años y detenida de forma violenta.
La menor quedó a cargo de un desconocido, quien semanas después entregó su testimonio, relatando lo ocurrido desde su perspectiva. Este caso ha puesto en el centro del debate la actuación policial y los derechos de las personas ante una posible detención.
Ricardo "Luss" Nigaglioni, un cantante y profesor de arte que se encontraba en la zona, fue testigo presencial del incidente. Según su relato, él se dirigía a su domicilio en el Bronx cuando observó la escena. Notó que la policía llegaba con rapidez y que Javiera fue empujada con fuerza, cayendo al suelo en medio de un caos. La niña, que estaba presente, lloraba desconsoladamente mientras miraba a su madre con angustia.
Nigaglioni comenta que en ese momento sintió una profunda preocupación por la seguridad de la menor y decidió actuar. Tras acercarse, le preguntó en español si conocía a la mujer detenida y, al notar que no dominaba el inglés, le explicó que Javiera era su madre.
La niña, visiblemente afectada, solo lograba llorar y señalar a su madre, lo que aumentó la angustia del testigo.
El testigo decidió averiguar a qué comisaría habían llevado a Javiera para poder entregarle apoyo y buscar a su hija. En sus declaraciones, Nigaglioni expresó su disposición a testificar en la audiencia contra la ciudadana chilena, asegurando que su intención siempre fue ayudar y proteger a la menor en ese momento de confusión.
Este incidente no solo ha puesto en cuestionamiento la actuación policial, sino que también ha puesto en evidencia las vulnerabilidades que enfrentan las personas migrantes y sus familias en Estados Unidos.
La historia de Javiera Montero se suma a otros casos de uso excesivo de la fuerza y violaciones a los derechos humanos en el país, que han despertado protestas y llamadas a una revisión de los procedimientos policiales.
La comunidad internacional ha puesto la mirada en este caso, exigiendo una investigación transparente y justicia para Javiera. Además, se ha recordado que en 2019, Estados Unidos enfrentó un fuerte debate sobre el racismo estructural y la violencia policial, tras múltiples casos de abusos que terminaron en tragedia.
Por su parte, la familia de Javiera ha solicitado que se respeten sus derechos y que se esclarezcan las circunstancias de su detención. La historia de esta madre chilena, que se convirtió en símbolo de lucha por la justicia y los derechos humanos, continúa generando impacto y movilizando a distintas organizaciones que buscan proteger a las víctimas de posibles abusos policiales en Estados Unidos.