Durante su participación en el IV Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana (Conasec), llevado a cabo en Cañete, el presidente peruano José Jerí abordó la presunta entrada irregular de varias decenas de migrantes indocumentados por la frontera sur con Chile, un hecho que supuestamente ocurrió durante la tarde del lunes.

El mandatario afirmó que está a la espera del reporte oficial que entregarán las fuerzas del orden que están desplegadas en la zona, señalando que la declaración de estado de emergencia debe aplicarse con rigor, según informó Canal N.

“Voy a esperar el informe de las fuerzas del orden que están en la frontera, porque si declaramos un estado de emergencia es para que se cumpla. No puede ser solo una formalidad”, declaró Jerí.

Asimismo, resaltó que permitir que situaciones como esta se vuelvan frecuentes genera un ambiente propicio para la ilegalidad y favorece la comisión de otros delitos, advirtiendo sobre los riesgos que implica la “teoría de las ventanas rotas”, concepto que ya había mencionado en discursos anteriores relacionados con la seguridad.

El presidente enfatizó que la medida de emergencia no debe ser un acto simbólico, sino que requiere una respuesta efectiva que asegure un control real en la frontera.

Aunque todavía no hay una cifra oficial de cuántos migrantes cruzaron de manera irregular, se estima que al menos 70 personas habrían ingresado en esas circunstancias.

En relación al aumento de migrantes en la zona limítrofe, Jerí adelantó que se está evaluando, en coordinación con la Cancillería y el gobierno de Chile, la posible implementación de un corredor humanitario.

Supuestamente, este corredor busca abordar la situación respetando el derecho internacional humanitario y manteniendo la autonomía de ambos países en la gestión de la crisis.

La iniciativa pretende facilitar el paso de migrantes de manera ordenada y segura, minimizando riesgos y garantizando la protección de los derechos humanos.

Históricamente, Perú ha sido uno de los países que más ha sufrido el aumento de migrantes en la región, especialmente en zonas cercanas a sus fronteras con países como Chile y Bolivia.

La migración irregular ha generado tensiones políticas y sociales, y ha puesto a prueba la capacidad institucional para gestionar estos flujos de manera efectiva.

En los últimos años, la migración desde Chile a Perú ha aumentado, en parte debido a la crisis económica y social que atraviesa el país austral.

La situación ha llevado a las autoridades a reforzar controles en los pasos fronterizos y a buscar soluciones conjuntas con el país vecino para evitar que la situación se descontrole aún más.

Supuestamente, la situación actual refleja también las complejidades que enfrentan los países de la región en materia de migración, donde los factores económicos, políticos y sociales continúan impulsando movimientos masivos de población en busca de mejores condiciones de vida.

La cooperación internacional y la adopción de medidas humanitarias serán clave para afrontar estos desafíos en el futuro cercano.

No te pierdas el siguiente vídeo de seguridad extrema en perú: estado de emergencia en todas las ...