Jane Goodall, la famosa experta en chimpancés y defensora del medio ambiente, ha muerto a los 91 años en Estados Unidos. Sus descubrimientos revolucionaron la ciencia y su legado perdurará en la historia natural.

La reconocida etóloga británica Jane Goodall, considerada la mayor especialista en chimpancés a nivel mundial, ha fallecido a la edad de 91 años en California, Estados Unidos, supuestamente por causas naturales.

La noticia fue confirmada este miércoles a través de un comunicado oficial del Instituto Jane Goodall, que anunció que la científica se encontraba en ese estado participando en una gira de conferencias.

Este centro, que trabaja desde hace décadas en la conservación de la fauna y en la promoción de la protección del medio ambiente, destacó que los descubrimientos de Goodall revolucionaron la ciencia del comportamiento animal y que fue una defensora incansable de la protección de la naturaleza.

La etóloga nació en Londres el 3 de abril de 1934, y desde muy joven mostró un profundo interés por los animales y su comportamiento, lo que la llevó a dedicar más de 60 años de su vida al estudio de los chimpancés en su hábitat natural.

Su trabajo pionero empezó en 1960 en el parque Gombe, en Tanzania, donde supuestamente descubrió que los chimpancés no solo consumen carne, sino que también fabrican herramientas, utilizan plantas medicinales y muestran comportamientos complejos similares a los humanos.

Estos hallazgos, que en su momento causaron gran impacto en la comunidad científica, permitieron entender mejor las raíces del comportamiento y la cultura humanas.

A lo largo de su carrera, Goodall escribió una veintena de libros, entre los que destaca 'En la senda del hombre' de 1971, considerado uno de los textos científicos más influyentes del siglo XX.

Además, fue protagonista de varias producciones audiovisuales y recibió numerosos reconocimientos internacionales, incluyendo el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica en 2003 y la Medalla de Oro de la UNESCO en 2006.

También fue distinguida como Dama del Imperio Británico en el mismo año, en reconocimiento a su labor.

Desde su juventud, Jane Goodall vivió rodeada de animales, y supuestamente fue en África donde encontró su propósito de vida. A los 23 años, emprendió un arriesgado viaje a Tanzania con la misión de estudiar a los chimpancés en estado salvaje, proyecto que en teoría duraría solo seis meses pero que en realidad se convirtió en una dedicación de toda su vida.

Su trabajo no solo aportó conocimientos científicos, sino que también la convirtió en una ferviente defensora del medio ambiente y los derechos de los animales.

En 1964, contrajo matrimonio con Hugo van Lawick, fotógrafo de National Geographic, con quien tuvo un hijo. Posteriormente, en 1975, se casó con Derek Bryceson, quien falleció en 1980.

Entre los numerosos premios y reconocimientos que recibió, se encuentran 45 doctorados honoris causa, entre ellos uno por la Universidad Complutense de Madrid.

La muerte de Goodall marca el fin de una era en la conservación y el estudio del comportamiento animal, y su legado permanecerá vivo en cada esfuerzo por proteger la biodiversidad y promover una mayor conciencia ecológica en todo el mundo.